La sospechosa, ayer, en el momento de abandonar el edificio de los juzgados de Eivissa. Foto: VICENÇ FENOLLOSA

Sandra Liliana G.R., una ciudadana colombiana de 31 años de edad, fue trasladada ayer por la mañana por la Guardia Civil a los juzgados de Eivissa para comparecer ante la juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Eivisssa, ayer de guardia, para establecer su condición penitenciaria tras ser detenida el pasado sábado por la noche en el puerto de Sant Antoni cuando portaba cerca de un kilo de cocaína. Tras declarar ante la juez, la representante de la fiscalía solicitó el ingreso en prisión de la joven, petición que fue atendida por la juez, denegando igualmente una fianza por su libertad.

La sospechosa fue interceptada por una patrulla de la Benemérita cuando descendió del barco que acababa de trasladarla desde Dènia hasta el puerto sanantoniense. La droga, que hubiera alcanzado un valor en el mercado de unos 33.455,42 euros, se encontraba escondida en su equipaje.

Según las primeras indagaciones de los investigadores de la Guardia Civil, Sandra Liliana G.R. podría haber estado prestando servicios como 'correo' para algún grupo de narcotraficantes. De hecho, las miradas de los investigadores se dirigen ahora hacia este último punto, puesto que este tipo de detenciones han permitido esclarecer algunas conexiones de las redes ibicencas con grupos de origen latinoamericano dedicados al narcotráfico y ya establecidos en la península.