El capitán del rápido denunciado por ir bebido mostraba síntomas que evidenciaban que había tomado alcohol, tales como ojos vidriosos, el aliento y una conducta negativa encaminada a ocultar este hechos tras negarse sistemáticamente a la etilometría y a la analítica de sangre que se le ofreció en varias ocasiones.

Estos hechos han quedado recogidos en el informe que efectuó la Guardia Civil después de que agentes de la unidad de Policía Judicial tomaran declaración al sospechoso y posteriormente se diera aviso a miembros del destacamento de Tráfico, equipado con los medios precisos para poder determinar empíricamente si el capitán iba bebido.

Todas las fuentes consultadas por este periódico conocedoras de la investigación confirmaron ayer las informaciones publicadas al respecto por este periódico y precisaron que todo ello quedó recogido en el atestado entregado a la Capitanía Marítima. Estas mismas fuentes precisaron que el capitán acusado, ahora relevado hasta el fin de la investigación, no iba completamente borracho pero que dentro de los signos detectados era claro que había consumido recientemente alcohol en cantidades más que moderadas.