Los refuerzos redujeron rápidamente al perturbado. Foto: O.R.

Un hombre, que según todos los síntomas se hallaba sujeto a un trastorno mental, provocó al mediodía de ayer un altercado en la Avenida Santa Eulària de Eivissa al darse a la fuga de un coche patrulla que le trasladaba a Comisaría después de que él mismo pidiera la colaboración policial. El agente que le llevaba se vio obligado a reducirle tras ver para su sorpresa como éste rompía una de las ventanillas traseras del vehículo e intentaba darse a la fuga. Tras un forcejeo que duró varios minutos, y con la llegada de más refuerzos, la policía pudo hacerse con el perturbado.

Testigos presenciales explicaron a este periódico que el protagonista de estos incidentes, un español con residencia en la isla, fue recogido en la zona del puerto por un coche patrulla después de que al parecer él mismo llamara a Comisaría al «sentirse perseguido». El traslado duró pocos metros. Cuando el coche se hallaba junto a la Estación Marítima, el perturbado, como consecuencia probablemente de una paranoia, dio una patada a la ventanilla y escapó, cruzando la carretera. El policía se tuvo que emplear a fondo para reducirle con técnicas defensivas hasta que llegaron más agentes.