Los primeros resultados del examen forense practicado ayer a los
restos humanos hallados en la tarde del pasado domingo flotando en
alta mar, a unas tres millas de la costa de Menorca han revelado
que corresponden a una mujer.
Según informaron fuentes judiciales, el avanzado estado de
descomposición permite concluir que llevaba en el agua entre tres y
cuatro meses. De hecho, durante este tiempo ha desaparecido la
cabeza y las extremidades, así como gran parte de los órganos
internos.
Todo ello, según el informe de los médicos forenses, motivará
que resulte muy difícil la identificación de la persona fallecida,
cuyos restos fueron divisados a la altura de Es Pont d'en Gil
(Ciutadella) por la tripulación del yate alemán «Kola», que
navegaba entre Mallorca y Menorca.
El avistamiento tuvo lugar sobre las cinco de la tarde del
domingo. Los tripulantes del «Kola» comunicaron el hallazgo del
cadáver, que en un principio se sospechaba era el de un hombre, a
Salvamentos Marítimo, aunque al tratarse de una persona fallecida
el aviso pasó a la Cruz Roja que movilizó una embarcación
semirrígida que se hizo cargo del cuerpo.
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