La joven alemana Dagmar Barc, de 25 años, quien anteanoche resultó herida al ser tiroteada por su ex marido, que luego se suicidó, continúa ingresada en estado grave en la Unidad de cuidados Intensivos del hospital Son Dureta. Nuevos datos han permitido conocer que el asesino introdujo seis balas en el revólver Magnum 357 con el que disparó a su ex mujer. El último proyectil lo reservó para él.

Según las hipótesis que baraja la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de las investigaciones, el suceso respondió a motivos pasionales, después de que la pareja dejara de convivir hace mes y medio. El asesino se presentó en la casa en la que residía la mujer, ubicada en la localidad mallorquina de Moscari. Actualmente, tras la ruptura de esta relación, la mujer convivía con otro hombre.