EFE-EE UU La ciudad de Los Angeles fue sacudida ayer por un fuerte terremoto de intensidad siete en la escala de Richter, sin causar daños personales o materiales El terremoto sorprendió a la población a las 02'30 hora local (10.30 GMT), con una fuerte sacudida horizontal que meció las casas y los nervios de los residentes durante un minuto. Su epicentro se situó al norte del desierto de Joshua Tree, a 200 kilómetros al este de Los Angeles. El terremoto se vio seguido por numerosos movimientos, once de los cuales tuvieron una intensidad cercana a 5 en la escala de Richter, fuerza que llegó a 5'8 en la misma escala a las 06.00 hora local (14.00 GMT).

Hasta el momento, la policía ha confirmado que 80.000 personas se quedaron sin luz en el área afectada, pero la situación ha vuelto a la normalidad. La consecuencia más aparatosa del terremoto fue el descarrilamiento de un tren de pasajeros que circulaba en las proximidades del epicentro, sin que causara más que magulladuras y crisis nerviosas entre los pasajeros. Este seísmo ha sido uno de los que se ha dejado sentir con más fuerza en la ciudad desde el terremoto que tuvo lugar en 1994.