La supuesta violenta actitud de un pasajero que iba a tomar en la
madrugada de ayer en el aeropuerto de Eivissa a un avión con
destino a Israel provocó en este vuelo un retraso de más de dos
horas. El turista, de nacionalidad israelita, que según la versión
policial ocasionó todo tipo de incidentes, fue detenido. El pasaje,
sin embargo, consideró incorrecta la actitud de la policía y se
negó a subir al avión.
Los hechos ocurrieron en torno a la medianoche, hora en la que
estaba prevista que un MD-83 de la compañía «Spanair» despegara de
Eivissa con destino a la capital israelita de Tel-aviv. Los
primeros incidentes ocurrieron cuando al pasajero se le exigía la
documentación que el Gobierno israelita pide para entrar en su
territorio, según explicó un portavoz de Comisaría.
Según esta misma versión, el turista se mostró importunado e
intentó embarcar al igual que iban a hacer un grupo que al parecer
iba a viajar con él.
Las distintas versiones recogidas por este periódico a partir de
aquí son contradictorias. Unas fuentes hablan de que el turista
llegó a agredir sin más a un agentes y que luego intentó huir,
motivando una persecución dentro del aeropuerto que llegó incluso a
movilizar a agentes de la Guardia Civil que acudieron en apoyo de
los del Cuerpo Nacional de Policía después de que se les comunicara
la fuga.
Otras fuentes, pertenecientes a una agencia de viajes israelí,
sin embargo, aseguraron que el turista se limitó a defenderse de la
policía después de que los agentes mostraran un violento
comportamiento con su persona.
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