Dos empleados de «Servicios Navas», de guardia en un piso cuyas oficinas fueron asaltadas durante la Rúa del 98. FOTO: RAMON TUR

JOSE JAVIER MONERRI Robos, hurtos e incendios provocados como represalia por no firmar un contrato de seguridad o no pagar lo que se adeudaba, junto con empleados acusados también de agresiones sexuales y atracos con agresión a turistas, estos últimos, incluso, haciéndose pasar por guardias civiles. Esto es lo que supuestamente se escondía tras una empresa de servicios de Eivissa cuyas actividades delictivas han sido descubiertas por la Guardia Civil después de más de dos años de investigación con el resultado, hasta ahora, de cuatro detenidos, entre ellos el gerente de la sociedad: M.A.N.O, principal responsable de «Servicios Especiales Navas».

La detención la pasada semana de C.E.R. y J.J.R.M. por el puesto de Sant Antoni después de que un joven irlandés les acusara de agresión sexual, tras haber sido engañado, introducido en un coche y abandonado cerca del hipódromo de Sant Rafel, facilitó las averiguaciones que había emprendido la Benemérita en sus unidades de Sant Antoni y Santa Eulària. Estos mismos individuos se hallan relacionados con la oleada de robos con intimidación que desde mayo han sufrido varios turistas en la bahía de Sant Antoni.

A ellas, como ya informó Ultima Hora Ibiza y Formentera , siguieron durante el fin de semana las de M.A.N.O y J.F.L. Todo ello después de que al tirar del hilo la Guardia Civil encontrara indicios de que todos ellos podrían estar vinculados en una sucesión de robos todavía sin esclarecer y en extraños incendios en inmuebles y vehículos.

La propia Dirección Insular, a través de una nota de prensa, informó ayer que todos los sospechosos tienen nexo de unión con la entidad «Servicios Especiales Navas», firma con domicilio social en la calle Baleares de Eivissa, que realizaba irregularmente trabajos de vigilancia en establecimientos públicos y obras en construcción sin estar registrada como empresa de seguridad privada. La investigación, tras las detenciones realizadas por los puestos de Sant Antoni y Santa Eulària, les atribuye robos por un importe superior a los 20 millones de pesetas.

La investigación, de igual manera, ha resuelto que los sospechosos causaron en sus actuaciones «mafiosas» daños cercanos a los diez millones de pesetas. Se les imputa la comisión de tres incendios provocados en apartamentos, en un hotel y en dos turismos.

Los supuestos responsables de esta oleada de hechos delictivos han reconocido su participación en la larga lista que puso ante ellos la Guardia Civil y que han motivado su ingreso en prisión en régimen de preventivos.

El móvil de todo no sólo estaba en el afán de lucro, sino también en un peculiar método para convencer a los clientes para que mantuvieran los servicios de seguridad contratados. La empresa, de esta misma forma, se vengaba por los contratos que fueron cedidos a terceros y deudas que no se cobraban. En cada caso, existía la coincidencia de hechos inexplicables ligados a la presencia en algún momento del tiempo con la empresa «Servicios Especiales Navas».