BNP Entrevistes

«Los 80 y 90 fueron épocas muy buenas si se mira lo que hoy en día tenemos»

Con una larga trayectoria, Dani Becerra ha sido locutor de radio, organizador de pruebas deportivas y conciertos e incluso político

Dani Becerra durante la entrevista. | TEF

TW
0

Dani Becerra protagoniza esta semana 'Bona nit entrevistes', en la TEF.

-¿Dónde nació usted?

-En Andalucía, en un pueblecito de Algeciras. Mi madre, aunque su padre era ibicenco, se crió también en Andalucía y con seis o siete años llegué a la isla.

-¿Recuerda algo en particular de aquel tiempo?

-Yo, en realidad, me crié en Ubrique, donde estuve viviendo, y de allí sí tengo recuerdos, aunque pocos. Tengo más recuerdos de Ibiza, cuando vivía con mis abuelos, el mago Onofroff, porque yo vengo de una familia de artistas. Siempre he estado rodeado de este arte, de ir a ver a mi abuelo a un hotel, y tengo un recuerdo muy bonito de esa época.

-¿No empezó a torear en Ubrique?

-No, porque era muy pequeño. Mis padres vinieron aquí a ver a su familia, encontraron trabajo y se quedaron hasta la fecha. Toros no, pero en su día sí tuve mascotas como perros o gatos, aunque los toros son animales que me alucinan.

-Llega a Ibiza y supongo que el cambio fue importante.

-Yo creo que lo fue más para mis padres. Yo no percibí ese cambio y, al principio, sí que estar en una nueva casa y conocer a mis primos era algo diferente, pero no me generó dificultades. Por suerte, tengo unos recuerdos maravillosos de mi niñez y de mi adolescencia. Los 80 y 90 eran épocas muy buenas, si se mira lo que hoy en día tenemos a nuestro alrededor. Tampoco tuve problemas con el catalán. No me dificultó nada ni a nivel social ni laboral. En Ibiza se dan muchos casos de personas que se entienden uno hablando en catalán y el otro en castellano.

-¿No tuvo entonces una adolescencia complicada?

-La recuerdo muy bien y fue como la de casi todos los niños de la época: en la calle, jugando o en el mar. Siempre viví con mucha libertad y siempre estaba en la calle, sin ningún móvil en las manos, haciendo cosas. Teníamos una buena pandilla. Me crié en Figueretes, donde se hacían unas fiestas muy buenas en la calle Navarra. Recuerdo que hicimos una imitación de Hombres G y nos dieron hasta un premio. Con la pandilla, tuve la época de estar mucho en la calle y de salir a la discoteca, aunque yo fui poco. Es curioso porque iba con gente a quien le encantaba ese mundo. Sí puse música en muchos locales porque ganaba más dinero pinchando cuatro fines de semana al mes que trabajando en la radio. Haber comenzado en la radio, donde empecé muy joven, me abrió después muchas puertas para ir a poner música a estos locales.

-¿Qué fue primero: magia, radio o deporte?

-Lo primero fue la música, aunque el deporte siempre me gustó mucho. Ya creciendo, llegó una guitarra a mis manos y empecé a hacer canciones y a buscarme la vida para ver si podía aprender más. Fue una etapa que duró años. Tuve un grupo llamado Pasión y tocamos en muchos conciertos. Después, me gustó también la batería. A partir de ahí, tuve grupos de toda índole, llegando a hacer homenajes a Antonio Vega. Ya después, me llegó el tema del deporte e incluso formé un club, primero el Ample 32 y después el Club Atletismo Ibiza en el 2016. Han pasado nueve años y nos ha ido muy bien porque ahora tenemos a unas 30 personas y ha sido una etapa muy bonita porque el deporte te mantiene joven y con ganas de hacer cosas. En Ibiza hay mucha afición a correr. Gracias al club, pudimos convertirnos en organizadores de eventos deportivos como la 10K.

-¿Es complicado montar carreras como las que organizan?

Noticias relacionadas

-Es difícil porque hay mucho trabajo de burocracia y permisos. Todo tiene que salir bien y hay que controlarlo todo, preparar toda la logística. Nosotros recibimos ayudas tanto privadas como públicas y además con las inscripciones pagamos los gastos. Gracias a ello, intentamos cubrirlo todo porque son muchos gastos. Hemos organizado cinco ediciones de una carrera y todos los años aprendes. Estamos innovando y aprendiendo cada año y la carrera ha crecido una enormidad. Empezamos en el año de la pandemia y nos lo complicó todo. Comenzamos con 150 corredores y en el último año vinieron unos 1.500, atletas de nivel que proceden de fuera.

-Gracias a eventos así, la temporada está creciendo.

-Y el Consell está haciendo una apuesta muy fuerte por las pruebas deportivas de interés turístico. En Fritura, por ejemplo, se presentan estas carreras. Ibiza, para el deporte al aire libre, es inigualable. Muchos corredores que vienen de fuera no se imaginaban que se pudiera correr por el Parque Natural o con un clima fantástico en pleno invierno. Acaban encantados.

-Si hablamos de la radio, ¿cómo comenzó?

-Escuché que había un concurso para elegir locutores. Me presenté y esa primera vez me dijeron que no porque sólo tenía 15 años. A los 17, me volví a presentar y comencé en Los 40 Principales. Estuve ocho o nueve años que fueron fantásticos. Gracias a esos años, cogí experiencia como presentador. Se hacían conciertos gratuitos en el puerto y lo recuerdo con mucho cariño. Conocí a Revólver, que era uno de mis grupos fetiche. También comencé después a organizar conciertos e hice producciones para el Estiu Jove u organizando cosas en Sant Josep. La etapa de la radio fue muy buena. Siempre he sido muy inquieto y quise hacer muchas cosas. En la radio puedes quedarte estático, haciendo tu trabajo, o aprovechar ese trampolín. Es una recompensa cuando organizas algo, un concierto o una carrera, y la gente sale con una sonrisa.

-Además de correr, no le llamaron la atención otras disciplinas.

-Sí, en 2003 probé con mi hermano el mundo del triatlón, pero nos llevaba mucho tiempo. Ahora, lo de correr se ha convertido en un negocio por las cosas que llevan los corredores. Yo hice con mi pareja la Maratón de Nueva York, que fue toda una experiencia, pero es un desembolso importante. Se ha convertido en un gran negocio.

-¿Por qué corre si nadie le persigue?

-Para sentirme bien. Correr, cuando eres capaz de superar la barrera mental, produce un bienestar muy bueno y eso vale por seis terapias de psicólogo. Cada vez te encuentras mejor. La superación de ese momento se transfiere al terreno de la vida y piensas que puedes con todo. Te da un extra y es curioso.

-Y sobre el mundo de la magia, ¿se ha dedicado profesionalmente a ello?

-Casi. Mi abuelo tenía muchas ganas de que así fuera y con él hice algunas actuaciones. Era un mago de los de antes, muy elegante. Guardo muy buen recuerdo, pero no llegué a profesionalizarme.

-¿Esa magia la utilizó en política, o no le dejaron?

-No me dejaron. La política fue un camino para experimentar otro mundo. Otra experiencia de la que tengo buenos recuerdos. No tuve enemigos en política, sí algún conocido con el que me llevo muy bien. El de Sant Josep era un ambiente muy bueno.

-Si mañana le dicen de convertirse en presidente del Consell.

-No me veo. Ahora estoy fuera de este mundo, aunque de las mociones que en Sant Josep se quedaron pendientes, había una para buscar un terreno destinado a una pista de atletismo. Los niños que quieren aprender deben ir a otros lugares y Sant Josep es un municipio rico para tener una instalación deportiva así. El atletismo consta de muchas disciplinas y además las pistas pueden servir para otras cosas. Todo lo que sean instalaciones deportivas, nunca están de más.