Zumba, ejercicios de movilidad funcional y relajación contra el cáncer. | Arguiñe Escandón

El programa Sant Josep contra el cáncer, organizado por el Consistorio josepí con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer que se conmemora este martes, dio comienzo este lunes por la tarde con una clase de zumba, movilidad y relajación en el IES Algarb,    organizada por la comisión de Promoción de la Salud y FP de    Actividades Físico Deportivas del propio centro en el marco de Sant Josep contra el cáncer.

La actividad, liderada por Esther Lorente, jefa de las Actividades Físico Deportivas, y Ana Colom, coordinadora de la comisión de Promoción de la Salud de este instituto, se realizó con el objetivo de da visibilidad al cáncer y brindar apoyo tanto a quienes han superado la enfermedad como a quienes aún están en tratamiento y a familiares de pacientes.

El taller, de una hora de duración aproximadamente, se estructuró en tres partes: una actividad de zumba, otra centrada en entrenamiento funcional y una última dedicada a yoga y estiramientos.

La actividad, que contó con la participación de alrededor de 40 personas, se organizó bajo la petición de la concejala de Bienestar Social del municipio de Sant Josep, Marilina Serra, quien subrayó el papel fundamental que tienen las entidades implicadas en la lucha contra esta enfermedad.

Taller adaptado

Una de las particularidades del evento fue la accesibilidad para las personas que están atravesando procesos de tratamiento oncológico. Esther Lorente explicó que la actividad estaba pensada especialmente para las personas que han superado un cáncer, los que se encuentran en pleno proceso de recuperación y, en general, para cualquier miembro de la familia a partir de los seis años. «Cada participante puede adaptar los ejercicios a su capacidad. Para aquellas personas que están en tratamiento, ellos mismos saben lo que pueden y lo que no», explicó la responsable de Actividades Físico Deportivas.

Asimismo, durante la clase ofrecieron diversas alternativas para que los participantes pudieran regular la intensidad de su ejercicio en función de sus necesidades. En la parte de zumba, por ejemplo, se incluyeron opciones sin impacto, donde solo se movían los brazos, y otras más intensas, con saltos y movimientos más intensos.

«Este tipo de actividades nos permiten apoyar a aquellos que están pasando por momentos difíciles, a los que han vencido a la enfermedad y a los que aún luchan», comentó una de las participantes, que se enteró del evento a través de los medios locales. «Es una enfermedad que nunca parece que te tocará, hasta que, lamentablemente, lo hace de manera cercana», agregó, destacando la importancia de la concienciación.

Esta actividad fue una oportunidad para recordad la importancia de seguir colaborando en la lucha contra esta enfermedad.