José Raya frente a los palés que aún tiene que transportar hasta Valencia. | Arguiñe Escandón

José Raya es propietario de Punkytrans, la empresa de transporte ibicenca que desde el minuto uno se ha volcado en ayudar a los afectados por la dana de Valencia. Sus vehículos ya han transportado cerca de 200 toneladas de material donado por los ibicencos. Un volumen inimaginable para él y que demuestra que la sociedad ibicenca siempre está a la altura cuando es necesario.

¿Qué sensaciones tiene tras la primera semana después de la catástrofe de Valencia?
—Con mucha preocupación porque la parte más grande de la empresa está en Valencia, que es donde más gente trabajando hay tenemos y donde las instalaciones son más grandes. Muy preocupado porque aquello ha estado muchos días parados. El lunes empezamos a trabajar como pudimos. Hay sitios donde podemos ir a cargar y otros a los que no.

¿Cuál es su vínculo con la zona afectada?
—Desde los 14 años voy a Valencia. Tengo muchísimos amigos en la zona, gente que ha perdido muchísimo. Hemos hecho toda la vida negocio con Valencia. Hemos abierto delegaciones en Barcelona o en Palma, pero nuestra relación con Valencia es muy fuerte. Nos ha afectado mucho porque cuando sabes que la gente que conoces lo está pasando mal, te afecta.

Uno de vuestros camiones se vio envuelto de lleno en la dana. ¿Han tenido más percances?
—Tuvimos este camión y el remolque que embarcaron de Ibiza el martes pasado y cuando llegaron a Valencia se iban para nuestro almacén de Picassent, que está muy cerca del punto cero, que es Paiporta. Allí lo cogió el agua y todos los coches se fueron encima del camión, que estaba cargado de material de Ca na Negreta y aguantó por el peso que tenía. El chófer y todos los conductores que estaban por ahí se subieron sobre el camión y pasaron ahí la noche. Estuvimos en contacto toda la noche con el chófer para ver que estaban bien y no pasaba nada.

¿Cómo surgió la idea de empezar a llevar material hacia Valencia?
—Sinceramente, a mí me ha ayudado tanta tanta tanta gente que para un día que yo puedo ayudar no podía perder la ocasión. Voy por la calle y veo a uno y sé que me ha ayudado para una cosa, veo a otro y sé que también me ha ayudado en otra. Tenía los medios y qué menos que ayudar. A mí lo extraño me parece no ayudar en una situación como esta.

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¿Cuánto material han enviado ya a Valencia?
—El sábado sacamos siete vehículos, que eran 25.600 kilos en peso tasable. El martes, la Nostra Falla de Sant Antoni consiguió que salieran cuatro vehículos que serían unas diez toneladas más. Nosotros cargamos el domingo un tráiler en sa Coma con 25 toneladas más. El lunes cargamos dos tráilers más, que son 50 toneladas, el martes un tráiler más y el miércoles otro. Desde el viernes que se empezó a cargar, creo que llevaremos cerca de doscientas toneladas.

¿Le ha sorprendido tanta cantidad de material recaudado?
—Sabía que la gente es muy solidaria y que tendríamos bastante material, pero este aluvión no me lo esperaba. De hecho, el lunes teníamos previsión recoger para cargar un tráiler y recogimos para cargar cuatro.

¿Qué se encontró en Valencia el pasado fin de semana?
—Llegamos a Algemesí. He ido mil veces por esa autopista y hasta que llegas al río Júcar no notas nada diferente a cualquier otro día. Cuando llegas y ves lo que ha arrastrado el río ya piensas que ha pasado algo gordo, pero cuando sales de la autopista y ves el agua que hay cuatro días después, no te lo puedes creer. Y cuando entras al pueblo y ves lo que hay piensas que por allí ha pasado una guerra. Ves los montones de ropa, comida, muebles, colchones... todo está en la calle de los locales que han vaciado de porquería para que se la lleven.

El material que han recogido, ¿dónde lo dejan y cómo se reparte?
—Nosotros lo llevamos a Algemesí. Raúl Márquez y Nuria Moreno, de La Nostra Falla, son los que tienen los contactos para poder llevar los siete camiones y los que me dicen dónde lo tengo que mandar. Nosotros hacemos lo que podemos hacer bien: la recogida y el transporte. Y ellos se encargan de decirnos dónde van los camiones.

Por el momento han paralizado la recogida de material.
—Nos queda tanto material que sacar de Ibiza que vamos a parar un poco esta semana y la que viene veremos las necesidades que tienen y cómo se gestionan, porque no es fácil. Hay que tener en cuenta que llega ayuda de toda España. El sábado era una barbaridad los camiones que había para entregar mercancías.

¿Qué feedback tiene? ¿Qué le dicen Nuria Moreno o Raúl Márquez desde Valencia?
—Pensamos que hemos hecho un buen trabajo y que hemos ayudado en lo que hemos podido. Tenemos buenas sensaciones porque, como dice el refrán, quien hace lo que puede no está obligado a hacer más.