La basura sin recoger por la huelga de limpieza desborda Platja d’en Bossa. | mellon

Contenedores desbordados y basura por la calle. Así se encontraba este lunes toda la zona turística de Platja d’en Bossa como consecuencia de la huelga de limpieza de basuras en Ibiza. Zonzas como la calle de la Murtra, la avenida Pere Matutes Noguera o la carretera de Platja d’en Bossa amaneció ayer con una gran acumulación de basura mientras los turistas recorrían este lugar turístico de la isla. Una situación que afectó especialmente al sector hotelero y al sector de la hostelería y la restauración, ya que se había generado grandes montones de residuos cerca de sus establecimientos. En este sentido, la trabajadora de uno de los restaurantes ubicados en la calle de la Murtra señaló a Periódico de Ibiza y Formentera que el encargado del local les encomendó reducir la generación de residuos e intentar acumular toda la basura posible en el local durante esta huelga.

«Llevamos dos días sin sacar la basura y es complicado porque este fin de semana, justamente, hemos tenido muchos clientes y se ha generado bastante», señaló esta trabajadora durante su jornada laboral en el local. Un restaurante que estaba a unos cinco metros de varios contenedores desbordados de bolsas de basura. De igual manera se encontraba la carretera de Platja d’en Bossa, incluso esta zona sufría más las consecuencias de la huelga del servicio de recogida de basuras, ya que había un número mayor de contenedores desbordados, provocando un "olor intenso y un gran impacto ambiental". No es de extrañar que este sector mostrara ayer una profunda preocupación por los efectos de la huelga de recogida de basuras.

«No puede ser que ofrezcamos esta imagen a los visitantes en plena temporada», lamentó la encargada de un local, resaltando que los servicios mínimos no podían garantizar unos servicios suficientes de limpieza. «Sólo he visto cómo vaciaban las papeleras, pero no los contenedores», precisó esta mujer. En esta línea, también destacó que los propios empleados de los restaurantes tuvieron que limpiar ayer las aceras, que estaban llenas de cristales y basura almacenada de estos días de huelga. «Espero que trabajadores y empresas lleguen a un acuerdo porque no podemos estar más tiempo así», destacó, haciendo hincapié en que entendía las razones de estos empleados a la hora de convocar este paro.