El Ayuntamiento de Sant Antoni ha ordenado el cierre cautelar de dos establecimientos de fumadores, ubicados en las calles Sant Antoni y Progreso, por incumplimiento de las medidas para hacer frente a los efectos de la crisis ocasionada por el Covid-19 establecido en el decreto Ley 5/2021 del 20 de julio. Según informaron ayer fuentes municipales, la Policía Local realizó una actuación especial comprobando que en ambos locales se estaba sirviendo en el interior sin respetar las medidas sanitarias, por lo que se procedió al precinto del local por el riesgo que supone para la salud pública.
Reincidentes
En el local de la calle Sant Antoni, la Policía interpuso varias denuncias por estar abierto al público con diez personas en el interior consumiendo bebidas y comida, sin llevar la mascarilla obligatoria ni guardar la distancia de seguridad. El camarero también servía sin mascarilla en la barra del establecimiento, que se encontraba totalmente cerrado y sin ventilación. Además, no disponía de cartelería informativa sobre Covid-19 ni dispensadores de gel hidroalcohólico. Es la segunda vez que se decreta el cierre cautelar de este local, tras el ordenado el pasado mes de enero por incumplir también las restricciones sanitarias.
Por otra parte, en el local de la calle Progreso, los agentes comprobaron que había dos personas en su interior fumando, sin mascarilla y sin guardar la distancia de seguridad. El local también se encontraba totalmente cerrado sin ninguna ventilación. Las denuncias han sido remitidas a la Dirección General de Emergencias e Interior del Govern balear para la instrucción del procedimiento sancionador y la ratificación de la medida provisional de cierre adoptada.
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