El cliente ha conseguido así que se estime su demanda sustancialmente, ya que reclamaba que se dictara sentencia declarando que las condiciones generales incluidas en el contrato que regulan los intereses y comisiones no superaban el control de transparencia.
Subsidiariamente, pedía que se fallara que el interés remuneratorio impuesto en el contrato de línea de crédito es usurario, lo que determinaría la nulidad del mismo.
En definitiva, lo que el cliente solicitaba es que se condenara al banco a que reintegre cuantas cantidades abonadas durante la vida del crédito excedían a la cantidad dispuesta.
Cristina González Piñeiro, directora jurídica de la Reclama Por Mí, a quien acudió el cliente para su defensa, ha avisado del bucle infinito de deudas en el que los afectados se ven sumidos con este tipo de tarjetas.
"Cuando contratas una tarjeta revolving, no tardas en darte cuenta de que estás pagando demasiado por la cantidad que has solicitado. Los altísimos intereses que establecen las entidades que comercializan estos créditos pueden hacerte preso de ellos por meses, años... e incluso décadas", ha señalado.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.