El viernes se reunieron los dirigentes y los cargos electos en Ibiza con dos de los líderes del partido en Balears. | Daniel Espinosa

Ciudadanos reiteró ayer su posición e insistió en que no pactará con partidos de extremos para formar gobierno, como Unidas Podemos y Vox. Esa es una de las principales directrices a seguir impuesta a nivel nacional, mientras que Javier Torres, conseller electo en el Consell d'Eivissa de la formación naranja, explicó que tienen su criterio particular en base a la situación de la isla.

«Nosotros tenemos nuestro criterio que tenemos que consensuar con la dirección autonómica del partido, que no es Mallorca sino Baleares», matizó.

Concretamente, subrayó que «Mallorca respetará lo que se decida en Ibiza mientras no nos salgamos de los criterios generales del partido, así que no hay ningún problema».

En este sentido, Torres especificó que en la reunión mantenida el viernes entre miembros del partido naranja «se trasladó nuestro criterio a la dirección autonómica, al Comité de Pactos, y esto después lo explicarán en la reunión que tenga el Comité con los partidos».

Ambigüedad
En relación a cuál es el criterio en Ibiza, el conseller electo evitó posicionarse e indicó que tendrán que sentarse a negociar con las dos principales formaciones. Eso sí, coincidió con las declaraciones hechas la semana pasada por Vicent Torres, quien dijo que debe ser el partido que ha ganado las elecciones el que tome las riendas de la negociación y llamar al resto de formaciones para llegar a acuerdos.

De momento, los populares no han iniciado ningún tipo de negociación, ni formal ni oficial, «pero supongo que esta semana empezaremos a tener noticias», dijo Torres. «Nosotros lo que queremos es materializar lo máximo que podamos de nuestro programa y lo lógico sería entrar a formar parte de un gobierno».

Por ello, dijo que, sobre el papel, tienen más en común con el PP que con el PSOE, «pero hay que negociar y materializar el posible acuerdo».

«Contra poder del PP»
Sin descartar en ningún momento un posible pacto con el Partido Socialista, el líder de Ciudadanos insistió en que no se sentarán a negociar con Unidas Podemos.
«Si nos sentamos con el PSOE y ellos, por otro lado, se sientan con Podemos, dependerá a los acuerdos a los que lleguen porque en el Consell después se tienen que votar las cosas y tienen que salir, evidentemente», indicó. «En base a eso, cada uno que haga la lectura que quiera, pero la aritmética es la que es», añadió.

Podemos
Por su parte, Viviana de Sans, consellera electa de la formación morada, también negó un posible pacto en el que esté Ciudadanos. Además, recordó que las propuestas de Ibiza «se hacen en Ibiza y se intentan respetar», siempre y cuando no se pierdan las directrices del partido a nivel estatal.

De Sans tampoco se planteó quedarse a la sombra ante un posible acuerdo entre PSOE y Podemos y, si se diese ese escenario, «habrá que hablarlo». Lo que sí señaló es que un gobierno popular de cuatro años en el Consell d'Eivissa supondrá «paralizaciones de proyectos empezados y de políticas de crecimiento que se quieren cargar la protección del territorio».

La podemita recalcó que el PP «quiere hacer un contra poder al Govern balear», por lo que dijo entender a los ayuntamientos de Vila y de Sant Josep. «Quien sale perdiendo es la ciudadanía porque, desde algunos ayuntamientos, se van a impulsar políticas progresistas que se van a encontrar con un bloqueo monumental del Consell», lamentó.

El PSOE, a la espera
Más cauta se mostró Patricia Abascal, secretaria de organización de la FSE, quien insistió en que las negociaciones se iniciarán cuando lo decida el PP. «Ellos tienen la responsabilidad de intentar formar gobierno», dijo.

En esta línea, recordó que, en 2015, los populares obtuvieron más votos que los socialista «y no tenían la posibilidad que tienen ahora». Por eso, reiteró que «hasta que ellos no se sienten, nosotros no veremos qué haremos».

El PP recalcó que aún no ha habido contacto con Ciudadanos para llegar a un acuerdo aunque esperan iniciarlo esta semana.