El centro de enseñanza secundaria de Sant Llorenç se encuentra sin calefacción desde finales de la semana pasada, pero no han padecido las consecuencias de las bajas temperaturas ya que el sistema de calefacción es radial y mantiene el calor durante más tiempo aunque no esté en funcionamiento. «No está a la temperatura que toca pero no tenemos esa sensación de helor como pensaba; hace un par de años nos pasó y hacia un frío insufrible», recordó ayer la directora del instituto, Margalida Marí. Para evitar que los chavales sufrieran lo menos posible las consecuencias de no disponer de calefacción en el centro, la dirección del instituto remitió un aviso a la comunidad educativa la noche del domingo para informarles que se había roto la caldera y les aconsejaba que viniera al instituto «un poco más abrigados de lo que es habitual».
Hace dos años la caldera del sistema de calefacción del instituto de secundaria se averió en plena ola de frío y entonces la dirección del centro aconsejó a los alumnos que no vinieran a clase por las temperaturas tan bajas ya que en algunas aulas alcanzaban los 10 grados. El centro recuperó la normalidad unos días más tarde cuando la avería que afectaba al sistema de calefacción pudo finalmente ser reparada.
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