Las más pequeña era Michelle, que iba disfrazada de abeja y que trataba de completar un puzzle con su amiga Nayara, de cuatro años y que vestía de rana. Ambas son asiduas a este espacio, según explicaba Chelo, la madre de la más benjamina: «Bajamos casi cada día, no hace frío pero anochece muy pronto y aquí están mejor porque tienen toda clase de juegos y hacen amigos».
En otro rincón del Xerinola, una decena de chicos y chicas más mayores, de entre nueve y 15 años, atendía a Óscar Sánchez, director de la actividad. «Cada día organizamos algo distinto. Hoy (por ayer) toca concurso de disfraces», comentaba el dinamizador cultural. A su lado, Greta, Lucía y Fátima, de entre 9, 11 y 12 años, lucían sus disfraces, seguras todas ellas de llevarse el primer premio.
«También haremos distintos juegos, como el del pueblo y el oso, en el que los habitantes de un pueblo deben descubrir al oso que se oculta entre ellos mediante la cooperación, el debate y el análisis de los gestos de cada uno de los participantes», señala el dinamizador cultural de la Asociación Eivissa Omega.
El Esplai Xerinola seguirá ofreciendo actividades durante la próxima semana, con un torneo de fútbol-5, un campeonato de ‘Fifa 2016', una excursión en bicicleta a ses Salines o un taller musical con guitarras eléctricas.
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