Representantes políticos de todos los sectores quisieron estar presentes en la marcha del Ibiza Gay Pride realizada ayer. | Toni Escobar

Una gran caravana festiva y multicolor desfiló ayer en Vila en defensa de los derechos del colectivo LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales) en uno de los actos centrales del Ibiza Gay Pride.

Pasadas las 20:00 horas, la comitiva salió de la rotonda de los podencos ibicencos en Vila. La encabezaban una docena de dirigentes de todos los colores políticos, con el presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Torres, la vicepresidenta insular, Viviana de Sans, el alcalde Vila, Rafa Ruiz, o el conseller popular en la oposición Vicent Roig, entre otros.

Portaban una pancarta que pedía una «educación igualitaria en la identidad de género». Tras ellos, seguía la macedonia de colores con seis Meharis, cada uno pintado con uno de los colores de la bandera del arco iris, símbolo del colectivo LGTB.

Una decena de carrozas completó el desfile, que también contó con numerosos grupos a pie. La marcha discurrió por avenida de Santa Eulària, donde algunos centenares de personas acudieron para disfrutar de la gran boa multicolor. A su paso, una brigada municipal de limpieza minimizar los restos de confeti.

Finalmente, el recorrido culminó en el Puerto de la Marina, donde el deportista, empresario y actor Quique Sarasola leyó un pregón ante un creciente número de personas.

Tras el, estaba previsto que actuara la vocalista Rebeka Brown que, juntamente con otros artistas, alargarían la fiesta hasta la medianoche.