El borrador del plan de gestión de la costa oeste de Eivissa y del Parque Natural de ses Salines, un documento que ahora se ha puesto a debate para elaborar los documentos definitivos, analiza el estado de conservación y el futuro que tienen los hábitats de estos parajes protegidos.
Uno de los ejemplos es la lagartija de las Pitiüses, una especie endémica de protección especial que tiene infinidad de subespecies al adaptarse a los diferentes islotes. En general, la situación de este reptil es «satisfactoria y sin graves amenazas», aunque en los islotes costeros (salvo en los orientales, donde la densidad es buena) hay poblaciones «en franco declive o peligro de extinción», según el borrador.
Otra especie de las que se habla es el delfín mular. La población de Balears es una de las más numerosas del Mediterráeno español y se ha estimado que oscila entre 400 y 800 ejemplares. Viven sobre fondos inferiores a 100-200 metros. Tanto las condiciones del espacio protegido de la costa oeste de Eivissa, como el de ses Salines son buenas para el delfín, según el borrador, aunque no se hace un análisis de futuro.
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