El presidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer, ayer en el Parlament. | Joan Torres

La vicepresidenta del Consell de Formentera, Sònia Cardona y el conseller de Economía, Hisenda, Urbanisme i Territori, y portavoz de la institución, Bartomeu Escandell, informaron ayer del contenido de las alegaciones presentadas ante el Govern balear en contra de la creación de una Delegación del Govern en Formentera.
En base a ellas solicitaron oficialmente al Govern balear «no continuar con el proyecto de decreto y renunciar a crear una delegación territorial del Govern en Formentera, destinando las partidas presupuestadas a la mejora real de los servicios que la CAIB ha de prestar a los formenterenses».
Las razones que han presentado en un escrito de 15 folios giran alrededor de ocho puntos concretos. El primero de ellos es que el proyecto de decreto «va contra el sistema descentralizado balear» por cuanto «contradice los principios básicos sobre los que se fundamente la CAIB y es radicalmente contrario a lo establecido por los Estatutos de Autonomía tanto de 1983 como de 2007 basado en la desconcentración y la capacidad de autogobierno de cada una de las islas», siendo justamente la modificación de 2007 la que se hizo para dar vía libre a la creación del Consell de Formentera independiente del de Eivissa.

Justificación
En segundo lugar se hace referencia a la «falta de justificación del proyecto de decreto» ya que al señalar que la creación de una delegación es para mejorar la coordinación administrativa y la atención al ciudadano, se obvia que de los cerca de 17.000 escritos presentados ante el Consell en los últimos meses, tan sólo 740, menos de un 5 por ciento corresponden a cuestiones que afectan al Govern.
Otros dos puntos de relevancia para que el Consell de Formentera rechace la creación de la delegación territorial son por un lado que el procedimiento de elaboración del decreto no se ajusta al artículo 42 de la Ley 4/2001 de 14 de marzo del Govern de les Illes Balears y por no incluir una memoria que justifique la necesidad de dicha creación ni estudios de coste y financiación.
Más importante es para el Consell de Formentera que la propuesta del Govern cae en una «contradicción con los planes de simplificación y racionalización de la administración y los principios de eficacia y eficiencia que deben aplicarse a la administración autonómica», a lo que habría que sumar las duplicidades que se crearían. Pero eso se ve agravado porque la pretendida implantación de la delegación territorial, calificada por las fuerzas de izquierda como ‘comisariado político', supondrá la inoperatividad de laoficina de gestión integrada o ventanilla única de la OAC que es la que tramita todas las reclamaciones, demandas y escritos de las administraciones.

Ferrer: «Lo que pretenden es una suplantación de la voluntad popular»
El nombramiento de un delegado del Govern en Formentera volvió ayer al pleno del Parlament en el que el presidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer, pidió a José Ramón Bauzá que rectifique y reconsidere la decisión de su nombramiento, que tachó como «un agravio para Formentera». «Es tiempo de rectificar, si quiere acercar la administración autonómica a Formentera, del Consell siempre encontrará colaboración y lealtad institucional, pido de ustedes lo mismo», dijo el diputado en su intervención. Ferrer preguntó ayer por los motivos por los que se ha tomado la decisión y el conseller de Presidència, Antonio Gomez, se remitió a la respuesta que ofreció el presidente del Govern en la anterior sesión. Jaume Ferrer aseguró que el proyecto de decreto «contraviene los principios básicos de la Comunidad Autónoma y es rádicalmente contrario a lo que establece el Estatut d'Autonomía». En su opinión este nombramiento, «sería un agravio para el pueblo de Formentera que en las pasadas elecciones se decidió lo que querían democráticamente, y lo que ustedes pretenden es una suplantación de la voluntad popular y obtener por decreto lo que Formentera no le dio en las urnas; es injustificable, en un contexto de crisis tan profundo, originar un gasto de estas dimensiones y, sobre todo, porque no supondrá ningún avance en los problemas que padece Formentera por la insularidad que son muchos».
En su segunda intervención, Gómez, por su parte, aseguró que en los otros consells los distintos departamentos tienen delegaciones y se ha aplicado el principio de racionalidad con lo que en una sola delegación las englobará todas y será mucho más barato, el Govern se acercará más a los ciudadanos de Formentera».