Más de 50 padres de los alumnos del colegio Sa Real en Eivissa se reunieron ayer a las ocho de la tarde en el Parque Reina Sofía para aunar posturas por las diferentes cuestiones en las que difieren con la directiva del centro y con el Obispado.

Por un lado continúan molestos y desconfiados ante la opción de que finalmente se pueda ubicar el comedor social de Cáritas en el centro. «De momento en la reunión del otro día no se dijo nada de la nueva ubicación del comedor», aseguró una de las madres.

Por otra parte continúa el desencuentro entre el centro y algunos padres por «la imposición de un uniforme hasta 3º de E.S.O que cuesta alrededor de 300 euros y sin tener en cuenta la opinión de la mayoría de los padres que firmaron en contra», recuerda uno de los padres.

Por el uniforme de los alumnos y por el uso del polideportivo, en la reunión circularon escritos redactados por algunos padres que tenían previsto entregar firmados en el centro y decían que, «lamentablemente a fin de poder atender el nuevo gasto de uniforme impuesto obligatoriamente por el colegio, me veré obligada a suspender la aportación que vengo realizando en concepto de polideportivo» .