La obra civil de la depuradora de Cala Tarida ya está terminada y sólo falta introducir los equipamientos. El problema es que para funcionar necesita un colector y un emisario para los que todavía no existe autorización de la demarcación de Costas.

Según detallaron desde la Conselleria de Medi Ambient, este permiso está pedido, pero no saben cuándo pueden recibirlo. Después hará falta una licencia de obra del Ayuntamiento de Sant Josep, algo que suponen que irá rápido por el interés que existe de poder agilizar al máximo esta importante infraestructura.

Según explican desde Medi Ambient, la adjudicación de la obra y del colector y el emisario se hizo por separado durante la anterior legislatura. Ello provoca que ahora se tenga que llevar a cabo paralelamente el equipamiento de la depuradora en sí y la adjudicación del colector y del emisario.

Es por ello que es muy complicado decir cuándo podrá estar acabada esta infraestructura, que hace mucha falta desde hace muchos años y que han reclamado insistentemente los vecinos de la zona.

Aguas fecales

Precisamente esta semana la dirección del puerto de Cala Corral denunció las condiciones de insalubridad en la que se encuentran las instalaciones a causa de los vertidos diarios que provoca la depuradora que da servicio a la urbanización Coral Mar. Según explican, esta infraestructura pierde aguas fecales dos veces al día, a primera hora de la mañana y bien entrada la parte. Esto provoca olores «horribles» y una invasión de mosquitos, además de afectar a la salud de los trabajadores del luegar.

Desde la empresa encargada de la gestión de la infraestructura, Aqualia, dicen que poco pueden hacer para solucionar este problema hasta que no esté terminada la nueva depuradora de Cala Tarida. De hecho, los responsables de este puerto proponen que se lleven el agua residual en camiones.

Desde el Ayuntamiento de Sant Josep ya han reclamado que se intente encontrar una solución provisional pero indicaron que es muy complicado hasta que no esté hecha la depuradora de Cala Tarida.

Todavía no hay fecha para tomar una decisión sobre el solar en el que tiene que ubicar la nueva depuradora de Vila dentro del recinto de sa Coma. El desencuentro ya se hizo visible el mes pasado, cuando Medi Ambient consideró que la cota donde se quiere situar la planta, a casi cien metros de altura, es demasiado alta y supondrá un coste demasiado elevado. Desde Medi Ambient aseguran que es posible que agosto sea un mes inhábil para decidir esta cuestión por la gran cantidad de personal de las instituciones que está de vacaciones, pero indicaron que de todas formas tiene que ser el Consell d'Eivissa el que decida y tenga claro dónde quiere ubicar la depuradora.