El director insular de la Administración del Estado en las Pitiüses, José Manuel Bar, aseguró haber transmitido a la Guardia Civil de Tráfico las inquietudes de los vecinos de Sant Francesc. Pese a todo, asegura que los principales problemas de esta vía son las retenciones que se producen debido a una discoteca y a la gran cantidad de personas que acceden a la playa. «La Guardia Civil ya trabajaba en ese tema y seguirá trabajando en la medida que pueda constituir una preocupacion, como se ha tenido en cuenta en otras zonas», explicó Bar, que no pudo precisar si se habían hecho controles de velocidad en este punto concreto, aunque añadió que sí se han hecho en muchos otros lugares de la red viaria pitiusa.

C. ROIG
Hace más de un mes una vecina de Sant Francesc de s'Estany, María Cardona, entregó en el Consell más de 500 firmas que respaldaban la petición de controlar la velocidad en la carretera de ses Salines a la altura de Sant Francesc de s'Estany, un punto en el que denuncian que se producen múltiples accidentes y donde se incumple la limitación de velocidad de forma sistemática. Desde entonces, aseguran que nadie ha hecho nada para solucionar su problema. Tan sólo han recibido una carta del Consell en la que se les dice que están estudiando la problemática para ver las soluciones que pueden adoptarse teniendo en cuenta que este tramo de carretera se encuentra dentro del parque natural de ses Salines. La consellera de Vies i Obres, Stella Matutes, aludió hace poco a que siendo un parque natural no se pueden colocar determinadas señales luminosas. «Han consentido que durante dos meses se rodara un reality show en pleno parque natural con la instalación de grandes grupos eléctricos, luces y el paso de tráilers de 18 metros en pleno parque natural, uno de los cuales cayó en un estanque, ¿y ahora no pueden hacer esta obra por seguridad?», explicó ayer esta vecina, que añadió que no cuesta nada poner badenes para obligar a reducir la velocidad «y que la gente no pase por aquí a 120». «Me parece muy injusto que me digan que es parque natural; está el pueblo dejado de la mano de Dios, ¿y ahora no pueden hacer esto?».

Cardona asegura además que este verano no se ha hecho ningún control de velocidad en la zona por parte de la Guardia Civil. «Que pongan a un par de guardias durante dos días, ya verían a cuántos les retirarían el carné», añade esta vecina, que dice que los pequeños accidentes y frenazos son constantes. También recuerda que cada año se produce alguna muerte en este tramo.