En el taller se realizan diferentes actividades para conocer la cultura de la tierra.

Las visitas a los museos no tienen por qué ser aburridas para los niños. Prueba de ello es el primer taller de etnografía que se ha llevado a cabo desde el mes de agosto hasta esta primera semana de septiembre en el museo de Can Ros, en Santa Eulària des Riu. Como novedad, este año la Associació de Amics del Museu d'Etnografia con la ayuda de la conselleria de Patrimoni han realizado este taller para que los niños conozcan un poco más la tierra donde viven con actividades muy variadas como, por ejemplo, juegos fuera del museo, figuras con barro y con tela o bassetges. Todo ello relacionado con la isla y su cultura. «Todo lo que hacen es para que sepan un poco más de su historia», cuenta Susana Cardona, coordinadora del museo de Can Ros.

Una jornada cualquiera en el taller de etnografía empieza con una visita guiada por todas las salas del museo con el fin de que los niños conozcan cómo es realmente. «A continuación, nos ayudan a montar la mesa y preparar los materiales para hacer, entre otras muchas cosas, figuritas de payesas con barro y telas de colores y hondas», explica la coordinadora del museo.

El éxito de la iniciativa ha sido tan grande que el año que viene piensan repetir e, incluso, poner algún autobús para la gente que provenga de otros pueblos de la isla. Según Susana, «el taller empezaba a las 10 pero los niños ya estaban en la puerta a las 09,30 y se iban una hora más tarde de lo prevsito, a las 14, cuando la hora a la que debían salir era la una».

María José Real