El conseller de Medi Ambient, Jaume Font, junto al presidente del Consell Insular, Pere Palau.

B. ROSELLÓ
El conseller balear de Medi Ambient, Jaume Font, señaló tras la reunión con los afectados, patronales y Ayuntamiento de Eivissa que el Ejecutivo balear «respeta», a pesar de no compartir la idea, el terreno ofrecido por el Consistorio municipal. Por ello, Font resaltó que el Govern balear está dispuesto a colaborar económicamente con Vila para adquirir el terreno: «Durante la reunión ha quedado claro que el Govern ayudará con 600.000, 700.000 o 800.000 euros o lo que haga falta y que el Ayuntamiento de Eivissa ha tardado tres años y dos meses en encontrar un solar».

El presidente del Consell Insular, Pere Palau, también tuvo ocasión de defenderse de las críticas del Ayuntamiento, que hacían referencia a que la máxima institución insular debía «amparar y ayudar» a la administración local: «No sé porque se empeñan en desviar la atención hacia el Consell. Las gestiones que ha realizado esta institución han sido más que las que ha realizado el propio Ayuntamiento». Asimismo, Palau también tuvo palabras para el terreno elegido y señaló que, a pesar de no ser su responsabilidad, «el Consell hubiese elegido otro»: «No creo que sea el mejor porque quieren situar una depuradora entre los núcleos urbanos de Vila, Puig den Valls y Jesús, pero si no tiene otro que asuman ellos su responsabilidad». Asimismo, criticó que en Eivissa existen más terrenos de los propuestos y que a pesar de existir categorías medioambientales, no existe ningún impedimento por ser un tema de interés general: «Por tener urgencia, el Ayuntamiento no necesita ningún tipo de licencia, ni municipal ni autonómica».

Tras la reunión, el conseller balear de Medi Ambient recordó que el Ejecutivo balear ha invertido más de 63.658.000 euros en el archipiélago para mejorar y mantener todo el sistema de depuración de las aguas. Entre estas mejoras, Font anunció ayer la sustitución del emisario terrestre, que va desde la depuradora hasta la playa de Talamanca, así como reemplazar todo el tramo del colector cero hasta la depuradora. Las obras tienen un plazo de ejecución de seis meses y suponen una inversión de cerca de tres millones de euros: «La Conselleria está pendiente de la licencia de obras puesto. Si se recibe en los próximos 15 días las obras comenzarán en octubre». A pesar de estas modificaciones para aumentar el diámetro de la cañería, Font no garantizó que sean aprovechables por la nueva infraestructura: «El Govern no quiere que se vuelvan a repetir estas roturas».