La Conselleria d'Educació del Govern garantiza que el nuevo colegio de Sant Jordi estará listo para comenzar el curso próximo. «El objetivo es que esté a punto en septiembre para comenzar las clases, que los maestros puedan venir. Las obras van a buen ritmo», dijo ayer el gerente del Institut Balear de Infraestructuras Educativas (Ibisec), Andreu Obrador, que se desplazó ayer a Eivissa para visitar las obras del nuevo colegio. Obrador estuvo acompañado por el alcalde de Sant Josep, Josep Serra Escandell, los concejales Encarna Castro y Enrique Garcerán, la delegada de Educación, Pilar Marí,m y técnicos de Dragados, la empresa que ejecuta las obras.

Obrador destacó que esta escuela «será un orgullo para el municipio». El nuevo centro educativo contempla seis aulas de infantil, doce de primaria, un comedor y un gimnasio. «El equipamiento de la cocina ya está adjudicado», precisó el gerente. También está previsto un almacén de la Conselleria d'Educació para equipamientos educativos.

El colegio tendrá una capacidad de 450 plazas escolares, pero en septiembre sólo se pondrá en marcha los grupos de infantil por lo que el curso empezará inicialmente sólo con unos 60 alumnos.

El alcalde de Sant Josep expresó su agradecimiento al gerente del lbisec «por la preocupación que ha tenido desde que han comenzado las obras y esperamos que en septiembre puedan abrir y empezar las clases». Serra Escandell recordó que «hay mucha diferencia de construcción entre estas escuelas y las que tenemos».