Susana Rubio, Josefa Juan, Inma Hernández, Fina Alonso y Amparo Lloria llevan más de 25 años como funcionarias..Foto: MARCO TORRES

Se suele decir que ser funcionario es un chollo, pero esta afirmación no se ajusta siempre a la realidad y más si se trabaja para la Administración de Justicia, donde la falta de medios es crónica. Eso lo saben bien los ocho funcionarios a los que el sindicato CSI-CSIF homenajea por llevar más de 25 años en su trabajo, un tiempo en el que las cosas han cambiado mucho. «Cuando comencé hacíamos copias en la tienda de la esquina porque no teníamos una fotocopiadora», explica Josefa Juan, secretaria del Juzgado de Instrucción número 4. Hoy en día, las cosas están mejor, pero todavía falta mucho para que la situación sea ideal. «Hace poco nos pusieron un funcionario de refuerzo; tardaron en traer su mesa y los armarios tres o cuatro meses y tuvo que venir alguien de Madrid para montarlos». Tampoco en el Registro Civil, donde trabajan Fina Alonso e Inma Hernández, las cosas están mucho mejor. «Sólo llevamos informatizados desde hace dos años. Nos gustaría poder entrar, no ya en el siglo XXI, sino en el XX, porque no es normal que mandes a pedir certificaciones por correo y te las contesten tres meses después, igual que ocurría hace setenta años», se queja Inma, que recalca que son ellas las que tienen que dar explicaciones al ciudadano. «La cara de la Administración de Justicia somos nosotras, no el ministro ni el ni el presidente». Esto hace que muchas veces las cosas salgan adelante gracias a la voluntad de los funcionarios. «Siempre hay de todo, pero la idea de que no trabajamos no es cierta. No sé en otras administraciones, pero en la de Justicia hacemos más de lo que nos corresponde», subraya Josefa.

Claudia Roig