Una vista general de la feria de artesanía.

La feria de artesanía más importante de las Pitiüses vuelve a ser el centro de atención de la ciudad de Eivissa durante la Semana Santa.

Nuevamente ubicada en el paseo de Vara de Rey, la muestra estrena este año una carpa más grande y con más iluminación, y un suelo sin barreras arquitectónicas que favorecerá la comodidad «de las personas que vienen en sillas de ruedas», según aseguró el presidente de la asociación de artesanos, Gianni Rainaldi.

La inauguración oficial tuvo lugar a las 20'30 horas y estuvo dedicada al Año Mozart. Por ello, esta vez, la música del tradiciona ball pagès que cada año acompaña este acto fue reemplazada por un concierto de piezas del genial compositor que ofrecieron los alumnos del Conservatori de Eivissa; un homenaje que los artesanos brindaron por el 250º aniversario del nacimiento del músico austríaco.

Así comenzó la Plaça d'Art su vigésimotercera edición, que ayer por la mañana ya contaba con los primeros visitantes locales y turistas que no perdían ojo a las nuevas creaciones que este año ofrecen 26 expositores de las Pitiüses y de distintas comunidades de la Península. Una muestra que vuelve a ser un paseo por las manufacturas de los artesanos locales, enriquecida por los que llegan de Asturias, País Vasco, La Rioja y Cataluña.

Allí se puede ver cuero trabajado de mil y una formas y colores, joyería para lucir en días especiales y para usar todos los días, trabajos en cerámica, pinturas, esculturas, relojes, jabones y hasta pequeñas muñecas pagèsas para llevarse de recuerdo.

Otra de las novedades de la feria es la participación de Sa Colla de Sa Bodega con un stand de exposición de utensillos, instrumentos y prendas típicas pitiusas, que también cuenta con un taller en vivo de elaboración de espardenyes.

«Empezamos bastante positivos porque las fechas son muy buenas para trabajar con el turismo», explicó Rainaldi acerca de las expectativas de la asociación, que agrupa a diferentes creativos que se dedican a distintos sectores. Un ejemplo de ello es Domi, artesano de Cas Pagès, dedicado a hacer muñecas tradicionales y juegos de ajedrez y monopoli hechos también con payeses en miniatura: «El turismo español nos conviene porque todavía no tenemos mentalidad europea, todavía queremos traer regalos a casa; por eso tenemos que cuidarlos», comentó.

La Plaça d'Art estará abierta hasta el 23 de abril de 11'00 a 14'00 y de 17'00 a 22'00 horas y sólo se compone de artesanos titulados que diseñan y elaboran su productos a mano.

Luciana Aversa