Los activistas detuvieron las máquinas durante más de una hora. Fotos. GERMÁN G. LAMA

El tramo de la carretera de Sant Antoni comprendido entre la entrada y la salida a la localidad de Sant Rafel permaneció ayer cortado, desde las once de la mañana, debido al inicio de las obras por sorpresa y sin previo aviso del falso túnel previsto en los proyectos de reforma de las carreteras. Este hecho provocó la desviación de todo el tráfico por el interior del pueblo de Sant Rafel provocando un gran caos de circulación, debido en gran parte a la actuación de los activistas, que se dedicaron a hacer uso de los pasos de cebra.

La desviación del tráfico y la actuación de los activistas de la plataforma provocó una gran retención en la carretera de Sant Antoni formando colas de más de cinco kilómetros (desde el Hiper Centro hasta la entrada de Sant Rafel). Pasadas las 14,30 horas, el tráfico volvió a recobrar la normalidad aunque aún se podía observar una fila de vehículos en dirección a Sant Antoni desde el parque de Bomberos del Consell Insular. Hay que destacar que a última hora de ayer la carretera no contaba con ningún tipo de indicación que advirtiese al conductor de la obligación de pasar por el interior de la localidad de Sant Rafel, a no ser de unos pivotes luminosos en el desvío que advierten del peligro de las obras.

Pasadas las once de la mañana dos máquinas de la empresa adjudicataria, FCC, se instalaron en cada uno de los extremos del tramo para iniciar el levantamiento del asfalto e iniciar, así, la obra del falso túnel.

El presidente de la Asociación de Vecinos de Sant Rafel, Juanjo Cardona, reclamó al Ayuntamiento de Sant Antoni todos los datos de los proyectos, ya solicitada en una reunión anterior, así como toda la información «directa por parte del alcalde» de las medidas que se tomarán ya que el tráfico deberá pasar por el interior del núcleo urbano: «Según los encargados de la obra el corte de la carretera está previsto hasta mayo para iniciar la construcción del cuestionado túnel», indicaba un comunicado remitido por la asociación, que mostró su malestar por no haber contado con ningún tipo de aviso por parte de las instituciones correspondientes.

El túnel, de 1,3 kilómetros de longitud, tiene como objeto reducir el impacto visual y acústico. Servirá también para agrupar en la parte superior las vías de servicio y reducir así el ancho de ocupación, según consta en el proyecto mostrado por el Consell. Sobre el túnel se construirán dos rotondas a nivel para conectar las vías de servicio. La primera glorieta, situada en el punto kilométrico 5 dará acceso a la urbanización en la que se encuentra Privilege, mientras que la segunda se utilizará para acceder al pueblo de Sant Rafel.

B. R.
Cerca de 40 activistas de la Plataforma Antiautopista se dedicaron ayer al mediodía a cruzar por los tres pasos de cebrar ubicados en la localidad de Sant Rafel para mostrar su descontento con el paso del tráfico por el núcleo urbano y con las obras de la carretera. Tras más de media hora, los presentes se desconvocaron hasta primera hora de la tarde. A las 16 horas un gran grupo de personas se concentró en la carretera de Sant Antoni para impedir el trabajo de las dos máquinas durante más de una hora. Tres patrullas de la Guardia Civil 'invitaron' a los activistas a abandonar el lugar al considerarse de dominio público, solicitando la documentación a algunos de ellos por oponerse inicialmente. A las 18,30 la comitiva antiautopista se concentró en Sant Rafel donde volvieron a hacer uso de los pasos de cebra, coordinados por la Policía Local para evitar agravar aún más el problema. Pasadas las 19 horas y con un gran atasco formado en la carretera, el grupo abandonó el lugar.

Una infraestructura de 1,3 kms y cerca de 30 millones de euros

La construcción del falso túnel de Sant Rafel, previsto en el proyecto de trazado de la autovía de Sant Antoni, tendrá un coste de 29,5 millones de euros (casi 5.000 millones de pesetas), que supone casi la mitad del coste de ejecución de la obra (66,6 millones). El túnel, de 1,3 kilómetros de longitud, tiene como objeto reducir el impacto visual y acústico. Sobre el túnel se construirán dos rotondas a nivel para conectar las vías de servicio.