Propietarios de los apartamentos Residencial Vista Alegre y la empresa Nordaker, afectados por el corrimiento de tierras de sa Caixota del pasado 18 de septiembre, se reunieron ayer en Barcelona con el abogado que les representa, Josep Lluís Ríos, para acordar, entre otras cosas, que presentarán «una reclamación civil ante los Juzgados de Primera Instancia de lo Civil de Eivissa» contra las empresas HO Geofísica balear y Túneles y Taludes S.L. (TESS) como autores y ejecutores del proyecto de consolidación del bloque de apartamentos Residencial Vista Alegre que se realizó en 2002 después de que se detectaran los primeros problemas por la inestabilidad del terreno de la zona. Ríos detalló que se actuará también en contra del geólogo Raimundo Gómez, que se encargó, a través de H0, del diagnóstico de la zona, que resultó erróneo»; contra «el ingeniero Jordi Pi Ferrer, que firmó la ejecución de los trabajos, que resultaron ineficaces»; y contra «las compañías de seguros de las dos empresas y estas dos personas». Asimismo, explicó que «se reclamará el coste de los estudios que se hicieron, de las soluciones que se dieron, y de las obras de reparación que se realizaron posteriormente cuando se creía que la zona estaba ya estable». El abogado de los afectados calcula que «el coste del estudio geotécnico, las obras de recalce y los trabajos de reparación puede ascender aproximadamente a un millón de euros». Además, detalló que se pedirá al Ayuntamiento de Sant Josep «que certifique todas las licencias que concedió en ese momento para realizar estas actuaciones».

Otro de los temas que se abordó y que se está determinando, según Ríos, «es si la administración municipal y el promotor de la urbanización pueden tener alguna responsabilidad en este asunto». El abogado de los afectados recordó que «el promotor de la urbanización debería haber ejecutado en su momento las obras de canalización pertinentes» y explicó, en este sentido, que los técnicos «están atribuyendo el derrumbe en sa Caixota a la inexistencia de drenaje y de canalización de aguas pluviales en un terreno arcilloso». «El promotor deberá explicar si tomó las medidas oportunas para garantizar la seguridad de la urbanización», señaló.