Se conocieron en Barcelona hace dos años, y formaron Sakapatú, un grupo de música andina y afroperuana que este domingo protagonizará la sesión de conciertos familiares en Can Ventosa.

Formado por siete músicos, cuatro de Chile y tres de Perú, Sakapatú ofrece, en la actualidad, conciertos didácticos programados por 'la Caixa' con el fin de mostrar la historia y la cultura de la música sudamericana, más exactamente, de la música de los pueblos de la cordillera de los Andes.

Por ello, el show músico teatral llamado 'Sakapatú, un viaje por la música andina' llega mañana a Eivissa para deleitar al auditorio del centro cultural con un concierto que mezcla los sonidos precolombinos con las piezas renacentistas españolas.

«Mostramos de una forma muy didáctica y muy audiovisual esa mezcla, porque ahora lo que se hace en Sudamérica es interpretar la música andina tocada con guitarras y otros instrumentos que vinieron de España. Entonces en ese viaje queremos contar cómo comenzó esto», aseguró Gaddafi Núñez, integrante del grupo.

El concierto comienza con el Inca tocando la ocarina (instrumento de viento muy antiguo con sonido dulces) y la quena. También suenan las zampoñas, y otros instrumentos de percusión como las 'chac-chacs', hechas de pezuñas de animales. «Chac-chacs es un nombre quechua [una de las tribus andinas precolombinas] que se sigue haciendo con pezuñas de yamas o corderos y que suenan diferentes si se hacen con pezuñas de macho o hembras», destacó Núñez, que junto a Erkki Nylund, Cristian Escarate, Diego Hidalgo, Diego Abarca, Luis Caballero y César Toro, da vida a este viaje cultural.

El mismo está hecho de acuerdo al guión de Albert Gumí y con la ambientación de Xavi Esquerra y el recorrido continúa con la llegada de los españoles. «Aquí, la ceremonia central es el intercambio, y en él, el Inca le da al español la quena y un collar de oro, y el español le da las vestimentas», señaló Gaddafi sobre este concierto que continúa con esta mezcla entre los instrumentos europeos y los americanos, y las diferencias entre ambos.

Con un repertorio que continúa con los sonidos del charango, instrumento primordial de los Andes, la música cruza a Bolivia para interpretar su típico ritmo 'taquirari', y concluye con temas instrumentales que hacen alusión a la majestuosidad de los Andes y a los vientos de este lugar.

El cierre del concierto es con música afroperuana, en el que los intérpretes cuentan «cómo los esclavos de Àfrica fueron traídos hasta las costas del Perú, para hacer trabajos forzosos, y cómo empezaron a crear diferentes instrumentos».

La combinación de los sonidos andinos y los afroperuanos, cierran el concierto con un fin de fiesta sorpresa.

L.Aversa