El Govern balear multó ayer con 120.000 euros a los responsables de la tienda de ropa «Stradivarius», del grupo Inditex, por ejercer actividad comercial sin contar con la preceptiva licencia autonómica como «gran establecimiento». La sanción llega a raíz de un expediente abierto en febrero de 2004, cuando la mencionada tienda abrió sus puertas en la calle Ignasi Wallis de Eivissa. Posteriormente, el establecimiento se trasladó a la calle Bartolomé Roselló.

Según informó la Conselleria de Comerç, Indústria i Energia, promotora del expediente sancionador, la Ley de Ordenación de la Actividad Comercial de Balears establece que esta carencia supone una infracción grave. La licencia autonómica es obligatoria para poder construir un gran establecimiento comercial y es imprescindible contar con ella antes de solicitar la licencia municipal para ejercer la actividad correspondiente.

El departamento que dirige Josep Juan Cardona constató la irregularidad mediante una inspección realizada en febrero del año pasado e inició el procedimiento sancionador en junio del mismo año.