La inversión proyectada y licitada en el sector de la
construcción se situó en 2.624 millones de euros, un 42 por ciento
más que en 2004, unos proyectos que serán ejecutados en su gran
mayoría durante los años 2005 y 2006, según señaló el presidente de
la patronal, Sebastián Pastor.
Los mayores niveles de crecimiento se producen en el segmento
residencial. Así, la suma de los presupuestos de viviendas
incluidos en los proyectos de ejecución de obra visados por el
Colegio de Arquitectos de Balears se situaron el año pasado en 170
millones de euros, lo que supone un crecimiento del 43,32 por
ciento sobre 2003.
Por contra, la inversión en modernización de la planta hotelera
balear volvió a decrecer el año pasado hasta situarse en 7,2
millones de euros, un 72,36 por ciento menos que en el año
precedente. La cifra de descenso es muy superior en comparación con
la media de Balears, que fue un 28 por ciento.
El director de la patronal, Manuel Gómez, indicó que durante el
año se concretó la caída de proyectos generada por la moratoria
urbanística. Esta situación se tradujo en un descenso del consumo
de materiales -cemento y betún asfáltico- y en una reducción de los
trabajadores adscritos al régimen general de la Seguridad Social,
que pasaron de 41.689 a 40.861 el año pasado, mientras que los
autónomos pasaron de 14.172 a 14.442 en Balears.
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