La promotora de la urbanización de ses Torres, Lloma Talamanca, ha recurrido el auto dictado por el Juzgado de Instrucción número uno de Eivissa en el cual el juez rechaza la reanudación de las obras y considera que existen indicios suficientes de que existió infracción de las normas urbanísticas».

En el recurso, Lloma Talamanca mantiene que el auto contiene errores y, sobre todo, que no puede afirmarse que el Plan de Delimitación de Suelo urbano (PDSU) es nulo de pleno derecho porque así aparece en una sentencia anterior por un litigio distinto. Viene a decir que nadie ha impugnado directamente el PDSU y que, por tanto, «el propio tribunal no tiene competencia para resolver nulidades que no le han sido pedidas». «No ha habido un tribunal que haya afectado a la validez jurídica, vinculante y obligatoria de este proyecto», mantiene la promotora para defender la legalidad de la licencia y reivindicar la reanudación de las obras.

En este sentido, la defensa recuerda que el Ayuntamiento de Santa Eulària aprobó el 3 de agosto de 2000 el proyecto de urbanización de ses Torres, lo cual se notificó luego a la Comisión Insular de Urbanismo con la correspondiente publicación en el Boib «sin que nadie dedujese la menor observación a ello». Dice que los concejales de la oposición votaron en contra de la concesión de la licencia, pero «no recurrieron el acto».

Asimismo, insiste una vez más en que «el proyecto se extendía sobre territorios definidos como suelo urbano tanto en el PGOU como en el PDSU». Luego, la defensa esgrime que la arquitecta del Consell expidió a partir de noviembre de 2001 todas las certificaciones relativas a Santa Eulària sin considerar el PDSU porque, según dijo ella ante el juez, «así se lo habían ordenado».

Entiende así Lloma Talamanca que las certificaciones y actuaciones de la arquitecta del Consell tuvieron «la limitación de órdenes superiores» y apunta, por otra parte, que «esas órdenes superiores no se han investigado en este procedimiento».