Uno de los participantes intenta echar a volar su cometa.

En forma de pájaro, de elefantes, de colores, de papel de seda o de plástico fueron algunas de las características de las múltiples cometas que ayer sobrevolaron la zona de ses Variades de Sant Antoni. Se trataba de la 11ª edición de la convocatoria 'Posa un estel al cel'.

Tras dos horas del inicio de la convocatoria, los responsables de la cita llevaban registrados 250 participantes y frente al lugar de las inscripciones se formaba una cola de una veintena de personas más. Sin duda alguna, una cita con la que el frío no le pudo hacer frente.

Niños y mayores se afanaban en intentar sobrevolar la cometa, muchas de ellas de elaboración propia, otras tantas más profesionales. Aunque algunos no conseguían elevar el objeto más de un metro del suelo, el primer escollo que los participantes debían superar era desenrollar el hilo de la cometa o por lo menos no liarse con el de otra persona. Todo un gran reto, que muchos no lograron superar y optaron por cortar y renovar el hilo que permitiría dirigir la cometa.

El objetivo de la convocatoria era mantener el objeto al menos 15 minutos en el aire, tiempo cronometrado por los jueces que vigilaban la s distintas zonas de ses Variades. De esta forma, todos aquellos que superasen la prueba fueron premiados con una camiseta de la organización y con la satisfacción de haber logrado un gran reto. Los que no tuvieron ningún problema en mantener los objetos en el aire por un tiempo indefinido fueron los integrantes de la asociación 'Volant al Vent', que viajaron desde Valencia para realizar una demostración de acrobacia. La convocatoria de ayer registró una cometa con 400 metros de hilo, sin duda alguna, el récord de la undécima edición.