Las Pitiüses vuelven a quedarse sin el psiquiatra para atender los casos de niños y adolescentes. La plaza vuelve a quedar vacante, como sucedió hace un año, ya que el profesional cambia su destino laboral. Además, este servicio ofrece en Eivissa una peculiaridad, y es que depende del Consell aunque en el resto de islas de Balears forma parte del Ib-Salut, lo que provoca una separación de la atención psiquiátrica que recibe el niño y el adulto. «Produce una distorsión en el funcionamiento y una ruptura en el seguimiento de muchos casos, que se ve agravada por la situación muy particular de las islas, que es la falta de psiquiatras especialistas en salud infanto juvenil», dijo Vicent Serra. El Govern y el Consell han llegado a un acuerdo para que el Ib-Salut asuma la salud infanto juvenil en 2006. Tras la marcha del especialista, el Consell está buscando otro psiquiatra para que se haga cargo del servicio hasta dentro de un año y medio. Una vez que se traspase el servicio de salud mental infantil y juvenil al Ib-Salut, el recurso estará ubicado en el nuevo centro de salud previsto en Eivissa.

Las familias de enfermos mentales expresaron ayer su inquietud por esta situación y aseguraron que hay tantas carencias para niños y adolescentes «que haría falta aumentar los recursos profesionales en un psiquiatra y un psicólogo», dijo Larbán. Las familias piden también centros de días que complementen las actividades que se hacen en la escuela, cuidados más intensivos y el desarrollo de programas mixtos de las distintas administraciones para coordinar mejor los recursos y hacerlos más eficientes.

El cuatro por ciento de la población de las Pitiüses, unas cuatro mil personas, está afectada por un trastorno mental severo que puede ser susceptible de discapacidad. En cuanto a trastornos mentales graves en la infancia, como el autismo o trastornos de desarrollo, el psiquiatra Juan Larbán aseguró que va en aumento y en Eivissa puede llegar hasta un centenar de casos.