Zapatero y Matas se reunieron en La Moncloa durante dos horas en un clima de «cordialidad y lealtad». Foto: ALFAQUI

OLGA QUINTANILLA-MADRID
Rodríguez Zapatero se comprometió ayer ante Jaume Matas a respetar todos los convenio firmados entre el Gobierno y el Govern, que ascienden a 1.200 millones de euros, y aceptó negociar la petición del presidente balear de mejorar la financiación de la sanidad y la educación balear. Matas exigió a Zapatero 2225 millones adicionales para aumentar la dotación económica de estas dos competencias. «Ha sido una reunión muy cordial y positiva en un clima de lealtad», reconoció Matas al concluir su reunión con Rodríguez Zapatero. El encuentro se celebró en La Moncloa y tuvo una duración de dos horas. Durante la reunión, Matas entregó a Zapatero un dossier en el que se recogen todas las reclamaciones del Govern. El president solicitó a Zapatero la ejecución de las inversiones energéticas, el desarrollo de los convenios de carreteras, el de obras hidráulicas, el de regadíos, el de costas, el acuerdo que prevé la construcción de centros de servicios sociales y el pacto para la ejecución del programa «españa.es». En total, los convenios firmados entre las dos administraciones ascienden a 1.200 millones de euros. El president del Govern manifestó al concluir la reunión con Zapatero que el Gobierno central respestará escrupulosamente los acuerdos pactados con el Ejecutivo del PP y destacó, por encima de todo, que puedan desarrollarse los proyectos del gasoducto y el cable eléctrico entre Balears y la Península.

En relación al convenio de carreteras, Zapatero también aceptó la propuesta de Matas de revisar todos aquellos proyectos que aún no han sido ejecutados, tal y como ya propuso a Antich hace unos meses. Un portavoz de La Moncloa aclaró posteriormente que el Gobierno acatará el convenio siempre y cuando los proyectos viarios sean respetuosos con el medio ambiente y dispongan de todos los informes de impacto ambiental favorables. Sobre este asunto, el PSOE acusó a Matas de «esconder» que Zapatero mantendrá el convenio si se respetan los criterios de sostenibilidad. Pero Zapatero no fue tan concreto a la hora de comprometerse a cumplir las reivindicaciones de Matas en materia de financiación. El presidente del Gobierno comunicó al jefe del gabinete balear que estaba obligado a desarrollar el Régimen Especial de Balears tras haberlo prometido durante la campaña electoral. Matas recordó a ZP que tenía el compromiso electoral de desarrollar el REB. Por este motivo, el Gobierno central sí está dispuesto a promover en septiembre la creación de las comisiones mixtas previstas en el Régimen Especial. En este sentido, Matas preguntó a Zapatero si, finalmente, el Gobierno central aumentará hasta el 50 por ciento el descuento de transporte para residentes. El presidente del Gobierno dijo que su gabinete pretende incrementar el descuento para residentes, pero no pudo concretar cuándo se aprobará. Además, Matas advirtió a Zapatero que estará muy vigilante ante los acuerdos que puedan cerrar el Gobierno central y Canarias. «Le he dicho a Zapatero que en España hay dos archipièlagos y no sólo uno», manifestó Matas en declaraciones realizadas a este periódico. Zapatero tampoco se comprometió firmemente a revisar la financiación de Balears en materia de educación y sanidad.

El presidente del Gobierno explicó a Matas que considera que la financiación sanitaria deberá ser revisada a nivel global, aunque escuchó la propuesta del president del Govern. Matas recordó a Zapatero que el actual sistema de financiación contempla una revisión si aumenta la población escolar y el número de personas desplazadas que deben ser atentidas por la sanidad balear. En ambos casos, Balears cumple los requisitos para recibir una mejora económica. En total, Matas reclama 2.225 millones de euros para gasto corriente que deberá ser pactado ahora entre el ministro de Hacienda y el conseller d'Hisenda. La Moncloa acepta estudiar la propuesta de Matas. El presidente balear aprovechó su encuentro en La Moncloa para exigir a Zapatero que incluya en los presupuestos del próximo año el plus de insularidad para los funcionarios. Desde La Moncloa precisaron que el asunto debe estudiarse «sin plazos y con más profundidad».