El Consell calcula que a finales de este año comenzarán la obras de ampliación de la carretera que une Sant Rafel con la rotonda de los cazadores, en el cruce con la vía de Santa Eulària y Sant Joan. Se trata de un viejo proyecto, que data de 1996, y que consiste en la ampliación de los dos carriles de la carretera, de 7,4 kilómetros de longitud, y la inclusión de arcenes de metro y medio, así como la corrección de algunas curvas peligrosas. Las obras se ejecutarán en un plazo de dos años.

También se construirá una rotonda en el cruce delcamí vell de Sant Mateu, en el devío hacia el hipódromo, uno de los puntos negros de esta carretera. Concretamente, el ancho de la calzada pasará de los seis metros actuales (dos carriles de tres metros) a 10 metros, con dos carriles de 3,5 metros y dos arcenes de 1,5 metros. El perfil de esta carretera será exactamente igual que el de la de Santa Eulària, por lo que el Consell considera que muchos más conductores harán uso de esta vía, descongestionando el tráfico de la carretera principal de Santa Eulària. La consellera insular de Carreteras, Stella Matutes, recuerda que dada la peligrosidad actual de la vía por sus curvas y, sobre todo, su estrechez, la mayoría de los usuarios que tienen que ir hacia Sant Antoni desde Sant Joan o Santa Eulària prefieren pasar por Eivissa. La presión del tráfico de esta carretera, según datos de 2002, es de 7.158 vehículos de media al día.

El Consell lleva hoy a pleno la revisión del coste del proyecto, que actualmente se cifra en 7,5 millones de euros, incluidos 1,3 millones en expropiaciones, y que viene a ser el doble de lo que se presupuestó inicialmente en 1996. Esta obra se financiará con la dotación económica extra aportada por el Govern balear recientemente en cumplimiento de una cláusula del convenio del traspaso de competencias de carreteras del Consell de 2001.