El Ayuntamiento de Eivissa aprobó ayer en pleno por unanimidad la primera ordenanza municipal de circulación que prohíbe la actividad de «guardacoches, la venta ambulante y el reparto de publicidad» en aparcamientos públicos o disuasorios. De esta manera, según explicó ayer el concejal de Policía, Leopold Llombard, el Consistorio dispone de una vía para denunciar ante los Juzgados esta actividad. La ordenanza contempla una sanción de 91 euros para las personas que incumplan este artículo.

El nuevo reglamento también prohíbe el estacionamiento en la vía pública de vehículos en venta. Así, según dijo Llombard, el Consistorio quiere poner fin a la venta ilegal de vehículos denunciada por la Asociación Empresarial de Automoción de la isla. «Son como los top manta, pero con vehículos», indicó el concejal, que apuntó que la zona del Mc Donalds de Figueretes y Joan XXIII es el lugar donde acostumbran a operar estas «mafias» de la venta de coches. Hasta ahora, el Consistorio no disponía de «ningún elemento» para hacer frente a esta actividad ilícita. La grúa retirará estos vehículos de la vía pública y para recuperarlos el propietario deberá abonar una multa de 91 euros.

Asimismo, Llombard informó que la semana que viene seguramente se pondrán en marcha las áreas de circulación restringida de Dalt Vila y La Marina. En el barrio de La Marina el tráfico quedará cerrado desde las 20 hasta las 6 horas. Durante este lapso de tiempo sólo podrán acceder a la zona los vecinos y comerciantes con una tarjeta magnética. El mismo sistema se utilizará para restringir el paso de los vehículos a Dalt Vila. Para evitar la picaresca detectada por el Consistorio en el caso de Dalt Vila, la ordenanza prevé que los vehículos autorizados lleven una pegatina como la de la de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV).

Por otra parte, el equipo de gobierno rechazó una propuesta del PP en la que se solicitaba la contratación de guardias para que vigilaran los parques de la ciudad. La concejala Pilar Marí, del PP, aseguró que «el mantenimiento actual de los parques es inadecuado», en especial el Reina Sofía. Marí propuso, a cambio, que, para solucionarlo, «se contrate personal específico que se ocupe de garantizar el mantenimiento, la seguridad, la limpieza y el correcto uso de las instalaciones». El concejal de Personal, Antonio Roldán, consideró la moción como «positiva», pero indicó que su aprobación era innecesaria «porque todo lo que se pide ya se está llevando a cabo».