En los últimos meses Eivissa ciudad está experimentando un auténtico desembarco de franquicias, una modalidad que hasta hace pocos años era apenas testimonial en las Pitiüses. Prueba de ello son los cinco ejemplos de grandes cadenas que acaban de establecerse o lo van a hacer en las próximas fechas. La firma de ropa femenina Torero abre tienda en Josep María Cuadrado. Justo a su lado abrirá un Stradivarius, en la antigua sede de la librería Paperum en Bartolomé Rosselló. Stradivarius pertenece a la cadena de Zara (Inditex), y ya cuenta con otra tienda reciente en Ignasi Wallis. La misma cadena ha abierto en Eivissa un Pull and bear y un Kiddys Class. Todas sus tiendas están en la misma zona.

Otra próxima apertura es la de Pepe Jeans, que ha unido dos locales en la calle Ignasi Wallis para establecerse. Este comercio está justo enfrente de una nueva tienda Calzedonia, especializada en ropa interior y bañadores, que se suma a varios comercios de la misma cadena que ya ha llevan años en Eivissa. Intimissimi, que cuenta con una tienda en Bartolomé Rosselló, es de la misma compañía que Calzedonia.

Aunque la palma se la llevan las tiendas de ropa femenina, también ha abierto un nuevo comercio de ropa masculina de la cadena Blindaje en Isidoro Macabich.

El técnico de comercio de la Pimeef, Vicente Tur, cree que esta avalancha se puede deber a que los estudios de mercado de estas cadenas consideran que Eivissa es un buen lugar para establecerse. Tur asegura, además, que las franquicias resultan muy atractivas «porque el empresario que la monta cuenta con el apoyo de una marca muy consolidada, por lo que el riesgo empresarial es menor». Se trata de un producto ya experimentado, «ya sea de vestido o de restauración», insiste.

Otro fenómeno destacable es que varios empresarios que han contratado una franquicia la han abandonado con el tiempo. «Sobre todo sucede en restauración, donde los ejemplos más recientes son los del Lizarrán, que ha pasado a llamarse El Zaguan, y Entre tapas y vinos, que ha cambiado el nombre por Civet», explica Vicent Tur. «Estos empresarios dejan de pagar el canon a la franquicia y cambian la carta, aunque muchas veces el producto final es prácticamente el mismo».

El comercio ibicenco, caracterizado por su pequeño tamaño y por la gestión familiar «se siente en parte amenazado por esta dura competencia», reconoce Tur. «Son comercios con más experiencia global, su producto está más probado y los precios que ofrecen son más reducidos», afirma el experto en comercio.

Para Vicente Tur se están abriendo demasiadas tiendas en Eivissa y puede que se produzca un ajuste. «El mercado es libre, se puede abrir pero también cerrar y es posible que la demanda no cubra la oferta y desaparezca algún comercio».

Sí habrá Caprabo
La Pimeef estaba presente en la comisión de la dirección general de Comerç que decidió no dar licencia al Caprabo en el nuevo centro comercial de la entrada de Eivissa, junto a los Multicines, ni a un Lidl en Sant Antoni. Sin embargo, Vicent Tur aseguró que es más que posible que la empresa Caprabo recurra la decisión y logre la licencia de apertura. Por el momento la Pimeef no tiene constancia de que se vayan a instalar grandes franquicias en el centro comercial y aseguró que sí le consta que empresarios de Eivissa han alquilado locales para establecer allí sus tiendas.

La citada comisión de Comerç, en la que también participa Afedeco, CC OO, UGT, y Pime de Mallorca, entre otros, sí aprobó el establecimiento de un nuevo SYP en Can Bellotera.