La «Plataforma en contra de la autopista de Sant Antoni» dio entrada ayer en la sede del Consell Insular a algo más de 5.000 firmas de rechazo a este proyecto. Los «antiautopista» aseguran que tienen más puntos de recogida de firmas en toda la isla y que en las próximas semanas presentarán aún más muestras de apoyo de los ciudadanos en contra de la ampliación prevista de la vía de Sant Antoni.

La Plataforma se reunirá el lunes con la consellera insular de Carreteras, Stella Matutes, y, según dijo ayer Pep Marí, uno de los portavoces de la plataforma, en función del resultado de la misma se organizarán nuevas acciones y movilizaciones. «No nos pararemos. Hemos presentado las firmas para que la consellera vea que hay toda esta gente en contra del proyecto y recapacite. Si no es así tendremos que decidir qué acciones emprendemos», aseguró Marí.

Entre el 70 y el 80 por ciento de los propietarios afectados por la obra, según la plataforma, se han adherido a este movimiento ciudadano. Los últimos en unirse han sido la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) y la Asociación de Vecinos de sa Colomina. Marí insistió una vez más que la plataforma es apolítica: «Es imposible que entre las más de 5.000 firmas no haya seguidores del PP».

Por su parte, la consellera insular de Carreteras, Stella Matutes, declaró a Europa Press que en ningún momento sería capaz de afirmar que un ciudadano no tiene representación y reiteró que no está dispuesta a hablar de cosas que no sean reales y que no se han dado. Matutes lanzó además un mensaje «tranquilizador» a los vecinos afectados por el proyecto al asegurar que se ha buscado tocar el menor número de edificaciones posible, y que en los casos que se haga, se darán dos opciones: o reconstruir sus casas nuevas de forma idéntica o cobrar el precio de la misma.

El portavoz de la «Plataforma contra la autopista de Sant Antoni» que ayer entregó las firmas en el Consell recordó que en la campaña de las pasadas elecciones el candidato del PP a la alcaldía de Sant Antoni, José Sala, prometió la construcción de rotondas y reconvertir la carretera en una via lenta, copiando el modelo de Can Negre, lo que, según dijo Pep Marí, «no se cumplirá». «El programa presentado antes de las elecciones no decía nada de lo que piensan hacer», recalcó. La plataforma sostiene que la carretera de Sant Antoni no puede convertirse en ningún caso en una vía rápida como prevé el PP.