Las estadísticas indican que el día de fin de año preferimos pasarlos con los amigos.

Superada la Nochebuena y la comida de Navidad, todavía quedan varias celebraciones por delante antes de dar carpetazo a las fiestas de este año. Y aunque hay muchas tradiciones que se conservan, también es cierto que hay aspectos de estos festejos que están cambiando para amoldarse a nuevas concepciones sociales.
Los «Quaderns Gadeso» de diciembre, publicación balear que repasa mes a mes la realidad socioeconómica de las islas, han analizado en esta ocasión cómo viven y qué opinan los residentes en Balears de la Navidad. En total se han realizado 1.600 encuestas, 400 en cada una de las cuatro islas, y el resultado refleja diversos aspectos de las fiestas, desde cómo las califican los ciudadanos, hasta cómo se supera la temida cuesta de enero o qué es lo que más se regala estos días.

Fiestas familiares
Familiares, con este adjetivo califica el 42,4% de la población de Balears estas fiestas, aunque también llama la atención que un 14,2% destaque en primer lugar el intercambio de regalos, un hecho que pone de relieve que la fiebre consumista sigue ganando posiciones año tras año.
Por lo que se refiere al modo de celebrar las fechas más señaladas, los porcentajes señalan que en Nochebuena las amplias reuniones familiares son las más frecuentes, mientras que al día siguiente cada vez se tiende más a comer en compañía, únicamente, de la familia nuclear (padres e hijos).
Pasado mañana se celebra el fin de año, pero esa noche sólo el 10% la pasará en familia porque actualmente la costumbre es, cada vez más, la de reunirse con el grupo de amigos y salir a celebrarlo fuera de casa.
Resultan también curiosas las preferencias a la hora de decorar la casa o hacer regalos.