El Consell Insular manejará el año que viene un presupuesto de 63 millones de euros (10.400 millones de pesetas), lo que supone un incremento del 52 por ciento con respecto a las últimas cuentas del gobierno insular del Pacte. La institución ha funcionado este año con los mismos presupuestos del anterior ante la falta de acuerdo de los progresistas con Els Verds y el PP para aprobar las nuevas cuentas.

Lo más destacado de las primeras cuentas del nuevo gobierno del PP es el fuerte aumento del capítulo de inversiones, que, con un montante de 20 millones de euros (3.330 de pesetas), duplica la cantidad asignada a ello en 2002 por los progresistas. El PP también da especial importancia a la financiación de los Planes Insulares de Obras y Servicios (PIOS), que se incrementarán en un 50 por ciento. No obstante, el PP no informó ayer de las cifras presupuestarias que manejará el año que viene cada conselleria, por lo que se desconoce qué áreas dispondrán de mayor capacidad de inversión.

Para engordar las cuentas de la institución y, especialmente, el capítulo de inversión, el presidente del Consell, Pere Palau, aseguró ayer que se el nuevo gobierno ha conseguido muchos más ingresos procedentes de transferencias corrientes de la administración general del Estado y el Govern balear, así como un importante recorte en el gasto corriente.