El mercado británico se encuentra en franca regresión por la dura competencia de otros destinos.

MAITE ALVITE/AGENCIAS
La división del operador turístico alemán Thomas Cook en el Reino Unido estudia reducir para el año que viene la capacidad contratada en los vuelos procedentes del mercado británico con destino a Balears, si no se cumplen sus expectativas de reservas en las islas. Así lo explicó ayer el director de Producto en el Reino Unido de este mayorista, Simon Robinson, quien comentó que podría haber un trasvase de las plazas de los vuelos hacia destinos con un mejor comportamiento, como es el caso de los de largo recorrido, norte de Africa, Turquía o Croacia, que son competidores del archipiélago que no acusan el fortalecimiento del euro con respecto a la libra esterlina.

Robinson, que se resistió a dar cifras concretas sobre las previsiones de los resultados de su compañía en el Reino Unido para la próxima temporada en Balears, comentó que la oferta del «todo incluido» de Thomas Cook en las islas permanecerá muy próxima al 20 por ciento actual del total de plazas contratadas en las islas. El representante de Thomas Cook señaló que este mayorista había desplazado a las islas durante el presente año a 750.000 turistas británicos. No obstante, comentó que a fecha del 30 de septiembre de este año, el descenso de reservas de turistas procedentes del Reino Unido para destinos localizados en Balears es del 36 por ciento. Esta cifra contrasta con los datos de Croacia, que experimenta un aumento del 23 por ciento, y Estados Unidos, un 9 por ciento. Además, aunque las cifras globales para Turquía en Gran Bretaña registran un decremento de las reservas del 30 por ciento, Thomas Cook ha experimentado un aumento cercano al 10 por ciento para el país otomano.

Por todo ello, el director de Producto británico de este mayorista reiteró en la necesidad de «flexibilizar» la oferta para conseguir «un producto más atractivo» para sus clientes en los destinos españoles.