Los 17 apartamentos y el almacén del complejo residencial Pimar, ubicado en Port d'es Torrent, tendrán que ser demolidos, según la resolución del expediente de infracción urbanística abierto en año pasado por el Ayuntamiento de Sant Josep a la promotora de estos locales que, como se ha comprobado, no contaban con las licencias pertinentes. Asimismo, el concejal de urbanismo de este municipio, José Marí Ribas Reganes, explicó ayer que se «impondrá a Trovet S.A. una sanción de cerca de 180.000 euros». La sociedad tendrá un plazo aproximado de un mes, desde el momento en que reciba la notificación, para presentar alegaciones a esta resolución. Asimismo, el pleno de la corporación municipal tendrá que llevar a pleno la aprobación definitiva de la demolición de los apartamentos.

Por su parte, la Policía Local, llevó ayer a cabo el precinto de estos locales, ejecutando de esta forma la medida cautelar adoptada el pasado 1 de octubre por la comisión de gobierno del Ayuntamiento. Los agentes sólo pudieron precintar 15 de los 17 apartamentos, ya que las dos restantes permanecían ocupados por dos familias, que se negaron a abandonar las viviendas. Según explicó Marí Ribas, se pasará acta de estos hechos a los juzgados para que actúen en consecuencia.