La Comisión Europea ha amenazado al Govern con reclamarle la devolución de 3 millones de euros por no haber desarrollado el proyecto Life para la protección de las praderas de posidonia. El portavoz del Ejecutivo balear, Joan Flaquer, explicó ayer que la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea ha puesto en conocimiento del gabinete autonómico que dicho programa se encuentra en un grado de ejecución insuficiente y responsabilizó a los anteriores responsables de la Conselleria de Medi Ambient de dicha demora. El actual titular de este departamento, Jaume Font, viajará el lunes a Bruselas para evitar que la Comisión Europea reclame la devolución del dinero ya pagado al Govern para el desarrollo de dicho programa comunitario.

El programa Life debía ser impulsado por la Conselleria de Medi Ambient, la Direcció General de Pesca del Govern balear, el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (Imedea) y la Universidad de Barcelona. El acuerdo alcanzado con la Comisión Europea establecía que en septiembre de este año los distintos proyectos tenían que haberse desarrollado, al menos, en un 30 por ciento.

Flaquer señaló que la Dirección General de Pesca desarrolló casi el 60 por ciento del proyecto, Imedea el 45 por ciento y la Universidad de Barcelona, el 56 por ciento. En cambio, la Conselleria de Medi Ambient sólo ejecutó un 0,71 por ciento del programa Life, lo que puede provocar, según el Govern, que la Comisión Europea reclame el dinero del programa que ya se ha pagado a Balears. De los 2,8 millones de euros que debía gastar el departamento que dirigía Margalida Rosselló, sólo se utilizaron algo más de 20.000 euros.

El actual Govern explicó que la Comisión Europea remitió dos cartas a la Conselleria de Medi Ambient para advertirle sobre el retraso en la ejecución del proyecto. Y las autoridades comunitarias añadían en una carta remitida a Medi Ambient a finales del mes de junio que dicha situación podía «comprometer el alcance de los objetivos». Bruno Julen, jefe de unidad de la Dirección General de Medio Ambiente, calificó de «extremadamente grave» la actuación del Govern y criticó que el «proyecto sigue sin contar con la coordinación técnica y administrativa necesaria para un correcto funcionamiento».

La ex consellera de Medi Ambient, Margalida Roselló, de Els Verds, declaró a este periódico que el retraso en el desarrollo del programa Life se ha producido por las desavenencias entre su departamento y Demarcación de Costas para autorizar la ordenación de fondeos. «Durante cuatro años hemos tenido muchas dificultades con Costas», explicó Rosselló.