Cristóbal Huguet, director general de Ports, junto a José Sala, alcalde de Sant Antoni, explicó ayer el proyecto.

El Govern balear llevará a cabo el año que viene la construcción de una nueva estación marítima en el puerto de Sant Antoni. Las nueva terminal de pasajeros, que, según el director general de Puertos, Cristóbal Huguet, tendrán un coste aproximado de 750.000 euros (125 millones de pesetas) sustituirán a las actuales dependencias portuarias, que no reúnen las condiciones necesarias para hacer frente a la creciente demanda de pasaje. «El año pasado se registró un movimiento de 113.000 personas y este año seguramente será más alto, por lo que se hace necesario un espacio mucho más digno», subrayó Huguet.

El próximo día 13 la consellera de Obres Públiques, Mabel Cabrer, viajará a la isla y dará más detalles sobre la nueva infraestructura. La Conselleria ya está trabajando en la redacción del proyecto y, según Huguet, estará listo a finales de año para que la obra se pueda sacar a concurso en los próximos meses. De todos modos, el director general de Puertos avanzó que la nueva estación marítima se situará en una zona próxima al lugar donde atracan las embarcaciones y que el pasaje podrá embarcar por un nivel de cinco o seis metros por encima del suelo para evitar el cruce del tráfico de vehículos y personas.

Por otro lado, Cristóbal Huguet informó ayer al alcalde de Sant Antoni, José Sala, que antes de que acabe el año se licitarán las obras de reforma del muelle de ribera, concretamente la curva que une el nuevo Paseo Marítimo, que transcurre paralelo a la playa de s'Arenal, y el Paseo de ses Fonts, a la altura de la rotonda del huevo. Este es un viejo proyecto de 2000, cuya licitación quedó desierta en dos ocasiones porque ninguna empresa concurrió a la misma. El Ejecutivo autonómico ha aumentado el presupuesto de la obra, que asciende a poco más de un millón de euros, para que algún contratista sí acceda ahora a ejecutarla. Este proyecto prevé la retirada del espacio donde estacionan los autobuses, que se sustituirá por una zona ajardinada. Con ello, el Govern balear también pretende disminuir la presión del tráfico en las instalaciones del portuarias. No obstante, indicó que el tráfico de vehículos de pasajeros, con un total de 8.500-10.000 al año, «tiene poca incidencia».

La prolongación del paseo contará con una rampa para que las personas discapacitadas tengan una mayor facilidad para acceder a la playa. Huguet aseguró que la obra estará lista para el verano que viene.

Otra de las obras previstas para este año es la instalación de una pasarela de madera, desde la zona de atraque de las embarcaciones hasta la rotonda de entrada, para aumentar la separación del pasaje con el tráfico y dar un mejor servicio a los barcos del muelle. El presupuesto es de 225.000 euros.