El dique acogerá descargas de combustible antes de fin de año

«Los puertos necesitan mejorar la seguridad. Hoy en día la carga y los pasajeros viajan juntos y por ello lo primero que hay que garantizar es la seguridad», dijo Verger, que considera que «en septiembre u octubre la Autoritat Portuària podrá realizar una propuesta en firme y seria de las obras que se deberán hacer en el puerto de Eivissa».

Por el momento, «no hay ideas concretas» sino apuntes de lo que son las principales necesidades. Lo que está claro para el nuevo presidente es la «evidente necesidad de reordenar» porque en las condiciones con las que se trabaja ahora «son de colapso total».

Verger anunció que mantendrá una entrevista con el alcalde de Eivissa para tratar también la reordenación del puerto.

Por su parte, el presidente del Consell, Pere Palau, agradeció la sensibilidad del nuevo presidente de la Autoritat Portuària para resolver los problemas que hay tanto en el puerto de Eivissa como en el de Formentera, como son «la saturación que padecen, el espacio que ocupa, la falta de seguridad y comodidad para los pasajeros». Estos temas serán objeto de más reuniones que se mantendrán con el organismo portuario.

Con respecto a la puesta en marcha de descargas de combustible en el dique de Botafoc, para lo que es preciso que se habilite una canalización subterránea, Verger aseguró que es posible que antes de que termine este año ya se haya trasladado esta descarga a las nuevas instalaciones portuarias. Verger advirtió de que CLH está pendiente de una autorización de la Dirección General de Industria para poder empezar las obras de canalización, mientras que Gesa ya la tiene. «Esta sí que es una obra urgente, por lo que se ha pedido a Industria que active este permiso que es fundamental realizar la descarga en el dique».

Con respecto a los importantes incrementos de actividad de pasajeros y mercancías en el puerto de Eivissa de enero a junio de este año (el doble de cruceros y un 68% más de cruceristas, entre otros aumentos), Verger consideró «importante» tener una buena previsión de futuro y unas instalaciones acordes, porque «nada apunta a que se vaya a reducir el tráfico», remarcó, y añadió que «debido a este aumento continuo de pasajeros y de mercancías, va decreciendo la seguridad en el puerto», un tema que a Joan Verger le preocupa «mucho» porque es responsabilidad de la Autoritat Portuària.