El Museu d' Arqueologia d' Eivissa i Formentera en colaboración con la Asociación de Amigos del Museo han puesto en marcha por tercer año consecutivo el Taller de Arqueología de verano para niños.

El gran éxito de participación de los años anteriores, llevó a sus responsables a planificarlo otra vez. Como dice Ana Mezquida, coordinadora del taller, «los chicos y sus padres empezaron a llamar en febrero para saber cuándo tenían que apuntarse».

A mediados de mayo se abrió el plazo de inscripción y en tan sólo una semana se habían cubierto las 70 plazas disponibles. «Es increíble, ya hay lista de espera para el año que viene», comenta la coordinadora.

Quién no soñó de niño que quería ser astronauta, médico, bombero o arqueólogo. A algunos ya se les ha pasado la oportunidad de cumplir los sueños de la infancia. Sin embargo, todos esos pequeños que desean imitar a su héroe favorito pueden ir pensándolo para el año que viene. En los talleres de arqueología para niños, podrán visitar lugares llenos de historia cómo hizo Lara Croft, recuperar antiguos tesoros como Sidney Fox e incluso bajar a un hipogeo como Indiana Jones.

Los objetivos son conocer los métodos y técnicas de esta disciplina; comprender el valor de la Necrópolis del Puig des Molins; aprender algo de historia y fomentar el interés y el respeto hacia el patrimonio histórico y cultural. En líneas generales, se pretende acercar la arqueología a los más jóvenes, a través de diferentes actividades prácticas. Harán un simulacro de excavación en un hipogeo; visitarán lugares de interés histórico; aprenderán a documentar y analizar restos arqueológicos y harán un par de días de arqueología experimental produciendo pan y elaborando tejidos, para lo cual visitarán una auténtica casa payesa. Los niños están encantados, se lo pasan fenomenal y animan a los demás chicos a que vengan porque «esto es guai». Sergio Moreno y Santiago Marí son los dos pacientes monitores que transmiten a los pequeños el cariño por el arte y la antigüedad, a la par que responden entre risas las originales preguntas de los mini arqueólogos.

Cada semana desde el 14 de julio un grupo de diez chavales, de entre 8 y 12 años, descubre de primera mano lo que es esta disciplina. La novedad de este año es la incorporación de un grupo de chicos más mayores, de 13 a 16 años, que realizará el curso en agosto.

En la Necrópolis del Puig des Molins de nueve a una de la tarde se forman, entre semana, pequeños Indiana Jones que disfrutan aprendiendo historia de un modo práctico y en un ambiente casi familiar.

S. M. Debelius