El brote de rinoneumonitis equina, popularmente conocida como la gripe del caballo, que afecta a Mallorca y a Menorca, ha obligado a suspender la actividad hípica y el traslado de caballos en Eivissa como medida de precaución. Por el momento, se ha decidido suspender las carreras de trote durante los próximos 20 días, pero el paro se podría prolongar aún más en el caso de que se detectara algún caballo enfermo.

El Consell Insular pone en aviso a los propietarios de animales para que si detectan los síntomas de la enfermedad lo comuniquen de inmediato. Algunos criadores temen que alguno de los caballos menorquines que participaron en los actos festivos del Primer Diumenge de Maig pudiera haber introducido el virus en la isla. Por el momento, en Menorca ya se han hallado seis caballos afectados por la enfermedad y otro es sospechoso. En Mallorca es donde más afecta este brote vírico con 500 caballos convalecientes.

Este virus se transmite por el aire muy rápidamente y está en estado de incubación durante un plazo que oscila entre dos y diez días antes de que aparezcan los primeros síntomas, que son similares a los de la gripe humana: fiebre de 38 a 40 grados, tos, mucosidades y pérdida de apetito.

La única manera de confirmar el contagio del virus es mediante una analítica de la sangre. Por eso, el Consell insta a los propietarios a que en el caso de que detecten los síntomas lo comuniquen cuanto antes para poder hacer los análisis. La epidemia ha obligado a posponer hasta la segunda quincena de junio el Gran Premi Nacional, la carrera de trote más importante de la temporada, a la que cada año asisten muchos aficionados ibicencos.